La escuela de circo Carampa se despide con sabor a Lorca

Esta noche, a las 22.30, volverán a apagarse las luces bajo el telón de la carpa de la escuela de circo Carampa, en la Casa de Campo de Madrid. P.B.K. es el espectáculo con el que la escuela dará por finalizado su noveno curso anual de técnicas circenses. Dirigido por el actor y director argentino Hernán Gené, de 44 años, P.B.K. aúna teatro, baile y circo de calidad. Todo envuelto en la música de Tom Waift, y con esa textura particular que sólo tiene el espectáculo porteño.

Números de cuerda, malabares, telas aéreas, acrobacias, trapecio, contorsión, y percusión excéntrica en esta última función de la novena promoción de la escuela circense Carampa, que dirige el neoyorquino Donald B. Lehn.

Nacho saldrá al escenario, bajo trapecios y metros de telas convertidas en serafines, y contará hasta cuatro. "Uno, dos, tres, cuatro". Acaba de matar a sus cuatro hijos. Con un puñal de madera. El graznido de un gallo de corral le muestra la única salida posible: la bicicleta. El paseo de Buster Keaton, texto teatral que Federico García Lorca escribiera en 1928, sirve como punto de partida para este montaje circense, que ha preparado la escuela de circo Carampa. "En el espectáculo las palabras bailan y sirven como gatillo para el gesto circense", explica Lehn. "Durante el montaje del espectáculo, los alumnos han crecido técnicamente, como actores y en su modo de acercarse a su propia técnica circense".

El joven actor pedalea sobre su vieja bicicleta confundido entre el sueño y la realidad, persiguiendo un par de mariposas grises, y gigantes. "La bicicleta se le escapa (...). A lo lejos se ve Filadelfia", sigue Federico.

Nacho es aquel Buster Keaton lorquiano que inspirara al poeta granadino. Sólo que ni nació en 1966 en un rancho del Estado de Kansas ni se interpretó a sí mismo en The three ages o en The Navigator. Tampoco, claro, ha matado a nadie. José Ignacio Flores es uno de los 20 intérpretes circenses de P.B.K., "un road movie surrealista que discurre entre escenarios oníricos y la brutalidad material de una ciudad como Filadelfia, en la que sus habitantes conocen a la perfección el funcionamiento de las máquinas pero son incapaces de apreciar la diferencia entre una taza de té frío y otra de té caliente", como la define su director.

"Para trabajar los diferentes números nos hemos valido de las imágenes surrealistas que evoca el texto de Lorca", explica Guillermo Porta. Este gallego de 23 años ha cambiado sus habituales pelotas de malabares por naranjas para el montaje de Gené.

P.G.B. es el trabajo de todo un año, de los alumnos y los profesores de la carpa, artistas y atletas consagrados como Michelle Man, Óscar Diéguez, Marina Benites.

P.B.K. Hoy, a las 22.30. Albergue juvenil R. Schirrmann de la Casa de Campo. Precio único: 3 euros.