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Playas de Vélez acumulan basura tres días después del fin de la huelga

El ayuntamiento espera terminar hoy la labores de limpieza

Varias núcleos costeros del municipio de Vélez Málaga continuaban ayer con la basura acumulada durante una semana de huelga. El viernes pasado el ayuntamiento logró que se reanudaran los servicios pero estas zonas no han visto todavía ni una escoba. Tanto los trabajadores como la concejala de limpieza, María José Roberto, han asegurado que los trabajos de recogida de residuos culminarán hoy.

Enclaves como Benajarafe, Chilches o Almayate seguían ayer sufriendo los efectos de la huelga de la limpieza declarada en Vélez, a pesar de que ésta fue desconvocada el viernes pasado. Ese mismo día, el consistorio decidió establecer un plan de choque para recoger los residuos. En el dispositivo se incluyen trabajadores municipales y empleados de la empresa alternativa contratada para suplir a los huelguistas durante las movilizaciones. En total, unos 135 operarios y una veintena de camiones.

La conjunción de esfuerzos logró, según fuentes del gobierno municipal, limpiar cerca de 400 toneladas en el primer día de trabajo. Sin embargo, durante el fin de semana el empuje descendió. De las palabras de la concejala de limpieza, María José Roberto, se desprende que la relación entre los manifestantes y sus sustitutos temporales no han sido muy cordiales. "Los trabajadores municipales nos pidieron el sábado por la tarde que canceláramos el acuerdo con la empresa alternativa pero nosotros nos negamos porque queríamos acabar cuanto antes". La edil gestiona directamente los servicios de limpieza desde que se rescatara la concesión, adjudicada hace tres años y medio a la empresa Urbaser. "Ante nuestra negativa, rehusaron participar en el dispositivo intensivo", señala. A pesar de ello, Roberto afirmó que el plan, reanudado ayer, culminará hoy los trabajos de recogida.

La plantilla da otra versión. Según el representante de los trabajadores, Alejandro Fernández, los empleados se negaron a trabajar junto a una compañera que no respetó la huelga y prestó sus servicios a la empresa alternativa, problema que ya se ha solucionado. "Estamos trabajando a un ritmo frenético", afirmó. Fernández admitió que existe "mal ambiente" ante la presencia de trabajadores de la otra empresa.

La concejala también se excusó señalando que el municipio, con 150 kilómetros cuadrados y 11 núcleos de población, es muy extenso y "lleva tiempo limpiarlo". Sus declaraciones fueron respondidas por el portavoz municipal del PP, Francisco Delgado, quien manifestó que para acabar con el problema se debería haber contratado a más personal.

Los antiguos empleados de Urbaser todavía no se han reunido con el ayuntamiento para la firma de los acuerdos pactados. "Empieza a haber malestar porque hay que hacer las nóminas y contratar las vacaciones", afirmó Fernández.

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