El servicio de limpieza de basuras de Vélez-Málaga se restablece después de una semana en huelga

El servicio de limpieza de basuras se reanudó ayer en Vélez-Málaga después de una semana de huelga. El jueves por la noche, el ayuntamiento decidió rescatar la concesión de este servicio, adjudicado hace tres años y medio a la empresa Urbaser.

El Partido Popular de Vélez-Málaga acusó ayer al alcalde, Antonio Souvirón (PSOE) de realizar "una maquiavélica estrategia para dejar en entredicho a la empresa ante la opinión pública con el fin de dar una nueva concesión", según afirmó el portavoz del grupo municipal Francisco Delgado Bonilla. El alcalde manifestó que "el PP ha creado todos los problemas que ha podido durante el conflicto" y añadió que "todavía no se sabe lo que se va a hacer con el servicio". Actualmente, es el propio ayuntamiento, a través de la edil de Limpieza, María José Roberto, quien gestiona la recogida de basuras.

La noche que se rescató la concesión, una breve reunión con los trabajadores bastó a Souvirón para solucionar cuatro meses de debates infructuosos. "La cláusula del artículo 42 del pliego de condiciones establecía que la negociación del convenio colectivo debía ser aprobado por el pleno", aduce Delgado para justificar la limitación de la empresa para renegociar la subida salarial y la reducción de la jornada laboral que pedía la plantilla.

El ayuntamiento accedió a subir paulatinamente las pagas extras del 60% al 100% y a un aumento del IPC. El punto más conflictivo, los dos días de descanso a la semana que pedían los empleados, fue subsanado mediante un sistema de rotación y una jornada de trabajo con una hora más. "Si Urbaser nos hubiera hecho esta propuesta la habríamos autorizado de inmediato pero ellos estaban empeñados en subir el canon a 960.000 euros", afirmó el edil, quien declaró que los cambios "no tendrán ningún coste para el ayuntamiento".

A los que le recriminan tardanza a la hora de actuar, el alcalde señala que no podía inmiscuirse directamente entre la empresa y sus empleados. Souvirón destacó que al final intervino porque tampoco podían "esperar un laudo de obligado cumplimiento que hubiera tardado semanas".

Entre las causas para rescindir la concesión, Souvirón ha presentado la "la huelga y otros motivos anteriores". Para Delgado, "Vélez va a terminar pagándole una indemnización a Urbaser porque la huelga no es imputable a la empresa". La concesionaria ha dejado el tema en manos de su asesoría jurídica.

La adjudicación de los servicios fue polémica en su día. La oposición aludió entonces a la falta de un informe económico pormenorizado, sin el cual la adjudicación carecería del rigor y de la transparencia legales. También consideraba injustificado el tiempo de la concesión, 14 años.

Delgado adelantó que va a solicitar por escrito "cuáles han sido las motivaciones del alcalde para actuar en el último momento y no antes".