Derecho infractor
El derecho está basado en aplicación de la lógica; pero de forma sorprendente nos encontramos con un derecho infractor. Endesa (que lo de Sevillana es para tener contentos a los lugareños) está cobrando unos servicios, como es el suministro de energía eléctrica a los ciudadanos, restaurantes, empresas, hospitales y, en general, estamos todos enganchados a esta electridependencia necesaria en todos los sectores, domésticos, profesionales o sociales.
El calor no es excusa alguna para que siempre nos coja el mono de los apagones. ¿O se refieren al calor de llevárselo calentito? Única finalidad por la cual no existen las debidas inversiones en instalaciones obsoletas y falta de interés en tecnología punta, lo que evitaría la situación que padecemos.
Un servicio debe de cobrarse siempre que se preste de forma diligente, eficaz y contando con la conformidad del consumidor para el pago de la factura ya que debe de realizarse el trabajo para cobrarlo, hecho que ignora Endesa y pasa del consumidor con toda impunidad, siendo más rentable pagar una sanción que aumentar la sección del cableado.
Pero aquí se da el contra-derecho. Si un ciudadano no paga a Endesa por el mono (apagones), el consumidor entra en coma y además se verá perjudicado con los gastos de rehabilitación. Por lo que considero que desde la cúpula dominante de la eléctrica se produce un derecho infractor.
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