Niños de Haití

Hace unos días, EL PAÍS publicó un suplemento del New York Times explicando que en Haití se comen tortas de barro para engañar al hambre. ¿Sabemos qué comen los niños recién nacidos, o de meses? En Haití, cuando una madre fallece por el parto, cosa muy habitual, el bebé está prácticamente condenado a muerte. No hay leche para niños de corta edad. El padre, desesperado, intenta dejarlo en algún orfanato para que sobreviva.

La sarna, la tiña, las enfermedades gastrointestinales por el agua no potable y la desnutrición hacen estragos en los niños de corta edad. Las vacunas no existen. La atención médica es un lujo y conseguir la medicina más elemental es imposible. Los niños de este país son muy queridos, pero la pobreza extrema los mata a diario o les obliga a cederlos. ¿Os podéis imaginar su dolor?

Ahora parece que vamos a mandar tropas en tarea humanitaria y yo le pediría a nuestro Gobierno que a través de ellas canalice ayuda urgente para estos niños. Es importante garantizar que las cosas llegan a destino.

Si no tiene presupuesto, que lo comunique a las asociaciones de adoptantes, o a la opinión pública. Los españoles sabremos ser solidarios...

Hace muchos meses España suspendió las adopciones en este país. La situación política ha cambiado. Creo que ha llegado el momento de estudiar su reapertura, con urgencia. Tenemos gente de sobra para garantizar un buen control.