Sin objetivos concretos
Los inversores, una vez confirmadas sus expectativas sobre la subida de los tipos de interés en Estados Unidos, se han sumido en la confusión al carecer de objetivos inmediatos.
El problema para los mercados de valores es, en estos momentos, el de evaluar las repercusiones de la subida de tipos sobre la actividad económica, es decir, saber si la economía va a encajar sin contratiempos este primer encarecimiento del dinero.
Por el momento, los indicadores económicos de actividad conocidos en los últimos días muestran cierto debilitamiento no achacable a la subida de tipos, pero cuyo efecto se empieza a notar en la actitud de los inversores.Ayer se conoció el índice de actividad en el sector manufacturero del mes de junio, que, con un descenso de 1,7 puntos, quedó por debajo de las expectativas. También las peticiones semanales de subsidio de desempleo apuntan hacia un descenso en de la actividad, pues en la última semana volvieron a subir en 1.000 solicitudes, hasta alcanzar las 351.000 demandas.
El ambiente en el mercado de valores español fue variando a peor a lo largo del día tras una apertura marcada por el reparto de dividendos. Hasta seis de los principales valores del Ibex 35 pagaron ayer dividendo a sus accionistas, con lo que el descuento de esa cifra hizo aparecer las cotizaciones como más atractivas, pero el espejismo duró poco y al cierre el Ibex 35 tan sólo subió el 0,09%, para quedarse por debajo de los 8.100 puntos. El índice general de la Bolsa de Madrid subió el 0,18% y cerró en 852,07.
El resto de las bolsas europeas mantuvo una orientación similar a la de las últimas sesiones y la mayoría de los cierres apuntaba a la baja. París cedió el 0,45%; Francfort, el 0,44%, y Londres, el 0,88%.
Una de las pocas buenas noticias para el mercado español fue el incremento de la contratación, que alcanzó los 3.746,16 millones de euros para el conjunto del Mercado Continuo, con 2.374,49 millones en operaciones de compraventa en mercado.
La Bolsa de Nueva York cedía el 1,16% a media sesión.
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