En Consell prevé que en cinco años el gasto escolar de extranjeros crezca hasta 213 millones

El secretario autonómico de Educación, Máximo Caturla, aseguró ayer que con el crecimiento sostenido de la matrícula de alumnos extranjeros, a un ritmo anual del 11%, la Generalitat Valenciana dentro de cinco años tendrá que hacer frente a "un gasto consolidado por anualidad de unos 213 millones de euros" para atender la escolarización de los niños inmigrantes en los centros docentes valencianos. La estimación se hace tomando como referencia el coste actual por alumno y año -que es de 3.044 euros- y la cifra de matrícula al inicio de este curso, que estaba en 45.000 extranjeros [sin contar los 6.000 que se han incorporado durante el curso, que generan un gasto escolar añadido por ejercicio presupuestario en este momento de 136,98 millones de euros].

Caturla apuntó que "si no se tiene en cuenta este presupuesto, en 2009 se generará un déficit acumulado de 760,2 millones de euros", resultante -precisó- de multiplicar por cinco los 136,98 millones de euros que implica la integración en las aulas de los 45.000 alumnos matriculados este curso, unido a los 75,3 millones de euros más que se calcula que costará integrar a los 25.000 alumnos extranjeros más que habrá dentro de cinco años, si se mantiene el actual ritmo de crecimiento del 11% (4.950 niños extranjeros más por año) confirmado por también por el INE entre 1996 y 2001.

Financiación autonómica

En este contexto, Caturla reclamó, durante un encuentro con periodistas en la sede de la consejería, que el Consejo de Política Fiscal y Financiera aborde de este asunto, ya que los modelos de financiación autonómica no lo contemplaron y "la Comunidad Valenciana, como ocurre con los desplazados sanitarios, es de las más afectadas". Aunque, el secretario autonómico popular reconoció sin complejos que "este tema no se ha abordado ni por los gobiernos del PSOE ni del PP desde 1982".

En su opinión, y hablando como "ex director general de Presupuestos" del Consell, "éste es un tema que hay que poner sobre la mesa ya ", y "la Generalitat piensa hacerlo, al igual que en materia sanitaria". Caturla rechazó tajante las críticas sobre el elevado nivel de endeudamiento acumulado por el Consell del PP y aseguró que, en términos macroeconómicos, "la carga financiera de la Generalitat está en el 6% (muy por debajo del 50% de la carga que soporta una economía doméstica), lo que le permite flexibilidad".

Hay dos opciones dijo, "quedarse como se está", o "incrementar el doble la capacidad de la Generalitat para absorber el gasto en Educación y Sanidad, para ser más competitivos"; es decir, "endeudarse, porque puede soportarse el capítulo III de Presupuestos y el capítulo IX de amortizaciones". Máxime, tras el giro inaugurado hace dos días por el ministro de Economía socialista, Pedro Solbes, al romper el tabú del "déficit cero" y flexibilizar el cálculo del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, para dar maniobra a las autonomías.