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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Sara Lidman, escritora

Sara Lidman, una figura central de la literatura sueca contemporánea, falleció a la edad de 80 años tras una prolongada enfermedad. Si hubiera que conjugar en pocas palabras la línea vertebral de la vida y obra de esta escritora, no podrían faltar las de "compromiso de amor y solidaridad con sus semejantes".

Ella misma lo expresó claramente cuando recibió el Premio Pilot de literatura en 1999, el compromiso "con los cercanos y queridos y con los lejanos y desconocidos, con el terruño y con el mundo exterior".

Esta filosofía estuvo presente en la prolífica obra literaria de Sara Lidman tanto como en su tránsito por la vida. Más que una posición sustentada en una militancia política partidaria, era una actitud ética personal, sin duda coincidente con los postulados políticos de justicia y solidaridad, lo que determinaba su conducta.

Eso explica que su narrativa se nutra tanto de las peripecias de los mineros de la región norte de Suecia, de larga tradición de luchas sociales, como de las víctimas del régimen del apartheid en Suráfrica o de los bombardeos con armas químicas sobre Vietnam.

Su palabra, escrita o hablada, no era la de un intelectual común, sino la de alguien que expresaba con claridad y pasión los problemas de su tiempo. Y por ello tuvo una fuerza y una trascendencia perdurable.

No había cumplido los 30 años cuando irrumpió con dos novelas Tjärdalen (1953) y Hjortronlandet (1955) que sacudieron el ambiente literario ante lo que los críticos calificaron de "una renovación en el arte del manejo del idioma". En ambas novelas la problemática está centrada en el ámbito geográfico en que había nacido la escritora, en el que tenía profundas raíces que nunca olvidó y al que siempre volvió aun cuando por razones de trabajo debió vivir largos periodos en Estocolmo o en el exterior.

Por estas novelas la escritora recibió el premio anual de literatura que otorga el diario Svenska Dagbladet, en el año 1953.

Otras obras, Rengspiran (1958) y Bära mistel (1960) consolidaron su posición en el ambiente literario y probaron que Lidman había ingresado a éste para quedarse y perdurar.

Un viaje a Suráfrica en 1960, en el apogeo de la ignominia del apartheid, dejó una huella profunda en su vida y en su obra. "Un escritor" había comentado antes de partir, "debe ver cuánto le sea posible del mundo, para enriquecer su experiencia y para encontrar nuevas personas y problemas". Y en verdad que los encontró. En 1961 fue acusada de transgredir las leyes del apartheid (casi todos sus amigos y amigas africanos eran negros) y fue expulsada del país. La experiencia dio origen a dos libros, Jag och min son, (1961) y Med fem diamanter (1964).

Un viaje a Vietnam motivó un libro de entrevistas, Sam-tal i Hanoi (1966) y convirtió a la escritora en una figura emblemática del movimiento sueco contra la agresión de Estados Unidos y de solidaridad con Vietnam, de gran arraigo en el país como lo testimonió la histórica y controvertida foto de Olof Palme encabezando una demostración junto al embajador de Vietnam en Estocolmo.

Sara Lidman fue comparada con otras grandes escritoras como Doris Lessing y Nadine Gordimer.

Simultáneamente debió cubrir un frente de lucha interno. con una gran huelga de los trabajadores mineros en Svappavaara, en el extremo norte de Suecia y publicó, en colaboración con el fotógrafo Odd Uhrbom, un libro documental, Gruva, (1968)

Una veintena de libros de narrativa, ensayos y artículos periodísticos de debate, en los que se funden la maestría en el manejo del idioma, la visión humana de los personajes y la pasión por la justicia, son el legado perdurable que deja la escritora recientemente fallecida.-

Sara Lidman.
Sara Lidman.

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