Los productores de la industria de la animación ven necesario el apoyo de las televisiones españolas

Los productores del sector de la animación se reúnen desde ayer en Córdoba, en el Primer Foro para Profesionales de la Animación. Una de las conclusiones más significativas es que el sector necesita de la ayuda de la televisión para dar cabida a los productos. Antonio Zurera, creador de Dragon Hill, largometraje que obtuvo el Goya en 2003, sostuvo que la industria está por crear, pero que en España existe calidad suficiente para competir con otros países. La reunión ha sido organizada por la Asociación para el Desarrollo de la Animación de Córdoba (Animacor), impulsada por la Diputación.

Una de las trabas con la que se encuentra el sector es la salida televisiva de sus productos, con una cuota de pantalla mínima. Las creaciones norteamericanas y las japonesas son las que copan el mercado televisivo español, situación que aboca a los largometrajes y series de creación propia al mercado extranjero.

Además, Zurera incidió en que los canales autonómicos son los únicos que se aventuran a coproducir largometrajes. "Ha habido unos años en los que TVE no producía", explicó, "pero ahora se ha firmado un convenio de coproducción" con la Federación de Asociaciones de Productores Audiovisuales Españoles, de la que es miembro Zurera.

Otro lastre para los productos de animación resulta de las propias directrices de programación. Zurera destacó que el espacio que la televisión dedicaba a los niños, a la hora de la merienda, está ocupado por otro tipo de programas, como los magazines sociales.

Antonio Zurera descartó la creencia de que resulte más rentable para las televisiones comprar paquetes de series extranjeras. "Es cierto que el precio por episodio es más barato, pero es un ahorro falso porque si ayudas a producir creaciones propias eres propietario y puedes vender el producto".

Aunque entendió que el sector pida apoyo, abogó por la necesidad de emprender proyectos en solitario y competitivos. Zurera lanzó una llamada a la participación de los responsables de las televisiones, ya que se trata de una iniciativa "rentabilísima, como se ha demostrado en otros países europeos".

El productor de Dragon Hill incidió en la cantidad de puestos de trabajo que la industria requiere, "cinco veces más que una película convencional", precisó. Y subrayó que las nuevas tecnologías abaratan los costes de producción y abren nuevas posibilidades creativas, como las tres dimensiones.

Zurera, que prepara la segunda parte de Dragon Hill y el largometraje RH positivo en colaboración con Animacor, explicó que el sector en Andalucía aún está en una fase muy embrionaria. Detalló que en los últimos años se han realizado sólo dos largometrajes en la comunidad, aunque precisó que las pequeñas productoras se están abriendo camino.

El consejero de Economía, José Antonio Griñán, que asistió a la inauguración del encuentro, destacó que la animación recoge todos los elementos de competitividad por la calidad, y agregó que el sector requiere "formación, adaptación permanente, nuevas tecnologías y financiación flexible".

Precisamente en el tema de la formación es en lo que incidió Antonio Zurera. "Los productores necesitan que otras instituciones se dediquen a la formación, como en otros países, y ahora lo hacen la Junta de Andalucía, Animacor y el Consorcio Provincial", explicó.

Paralelamente al encuentro, que finaliza hoy, la Diputación de Córdoba acoge una muestra titulada Los Goyas de la Animación Española, que recoge las creaciones que han sido galardonadas entre 2001 y 2004 por el certamen de la Academia de Cine española: La Isla del cangrejo, El bosque animado. Sentirás su magia, Dragon Hill. La colina del dragón, El Cid, la leyenda, El embrujo del sur, Los reyes magos y Glup.