La ponencia marco del PSPV aboga por ampliar "sin corsés" su base social y consolidarse como alternativa

El secretario de Relaciones Institucionales del PSPV-PSOE, Joaquim Puig, presentó ayer la que será "la hoja de ruta para conseguir una victoria progresista en las elecciones de 2007". La ponencia marco del 10º Congreso nacional del partido, que se celebra a finales de julio en Castellón, considera que, superada la etapa de dificultades, el partido afronta un periodo de consolidación en el que los socialistas aspiran a convertirse en la "alternativa sólida" de una mayoría de progreso capaz de gobernar la Generalitat a partir de 2007.

Puig apoya este análisis en el "cambio de tendencia del voto, que favorece a los socialistas desde las elecciones autonómicas y municipales de 2003 y que se ha consolidado en las generales y europeas". El responsable de la ponencia marco recordó que con el 42% del voto que el PSPV ha consolidado en estas tres últimas convocatorias gobernaron la Generalitat en los años 80 y 90. "Hemos hecho además una oposición útil y responsable frente a un Gobierno del PP, que tiene en la confrontación con el PSOE su única estrategia", remarcó Puig.

El modelo político que postula el PSPV se sustenta en la reforma del Estatuto de Autonomía, "necesaria para acometer una segunda modernización de la Comunidad Valenciana", en un modelo económico volcado en el I+D+i y en el desarrollo sostenible, y en el "mantenimiento y ampliación del Estado del bienestar".

Para acometer esta segunda modernización, la ponencia marco defiende un partido "moderno y flexible, buscando militancias y adhesiones a la carta; sin corsés", en el que deben establecerse nuevos cauces de participación ciudadana que el partido necesita para elaborar un proyecto político "ilusionante" para esa mayoría de progreso en 2007".

La ponencia no se refiere expresamente a las relaciones con el resto de la izquierda progresista, si bien el secretario de Relaciones Institucionales precisó, a preguntas de los periodistas que "tendemos la mano a todos desde el más absoluto respeto a la autonomía de cada uno". No obstante, Puig quiso dejar claro que el PSPV es "una alternativa sólida" y agregó que, en estos momentos, no es tanto que el PSPV no sea capaz de atraer más voto como que el PP dispone en estos momentos de una concentración extraordinaria de voto, que integra desde la extrema derecha a las posiciones más moderadas.