Cientos de iraquíes celebran una matanza de extranjeros en pleno centro de Bagdad
Una camioneta bomba causó ayer la muerte de al menos 13 personas en pleno centro de Bagdad. El vehículo hizo explosión al paso de un convoy de contratistas extranjeros e hirió a cerca de 60 personas. Cientos de iraquíes rodearon después el escenario del atentado para celebrar la explosión y lanzar gritos contra los ocupantes. Entre los muertos se contaban dos británicos, un norteamericano, un francés, un filipino y dos africanos. Tres de ellos trabajaban para la empresa General Electric.
La policía iraquí logró retirar algunos cuerpos. Poco después permitió que los cientos de jóvenes rompieran cristales, quemaran banderas de EE UU halladas en los vehículos y corearan consignas contra el ocupante. Por otra parte, cuatro soldados británicos afrontarán un juicio militar por las torturas a presos iraquíes.