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Reportaje:Eurocopa 2004 | Un estreno victorioso

"¡Tiene que entrar Valerón!"

La vicepresidenta del Gobierno, Teresa Fernández de la Vega, dice que Zapatero le comentó por teléfono que debía salir el jugador canario

Diego Torres

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, confesó que en el descanso del partido de ayer llamó al presidente José Luis Rodríguez Zapatero, y éste la consoló en su desazón. "Me dijo que no me preocupara, que íbamos a ganar", contó De la Vega; "pero que tenía que entrar Valerón. ¡Tiene que entrar Valerón!".

De La Moncloa al litoral portugués, pasando por las gradas del estadio del Algarve, el reclamo de Valerón, apodado Flaco por sus compañeros, fue cósmico. Falta saber qué opinó al respecto el líder del PP, Mariano Rajoy, trasladado al Algarve para ver el partido, pero es de suponer que ayer Valerón unificó todos los criterios. Incluso el del seleccionador, Iñaki Sáez. "El cambio de Valerón siempre nos ha dado resultado", dijo. "Hemos tenido la suerte de que ha marcado nada más salir al campo. Éste es un asunto bastante preparado. Luego salió Torres para plantear el partido a la contra. Para el que no ha vivido el fútbol desde dentro puede parecer que Torres sale y con su velocidad cambia el partido. Pero son conceptos de equipo, de colectivo. Sabemos cuándo hay que emplear a cada jugador y el secreto es poner a cada uno en el momento justo".

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Tan justo fue el momento para Valerón que entró y en el primer balón que tocó metió un gol. "La verdad es que me he sentido un poquito como en casa, con toda la gente", dijo el canario, en relación a la mayoría española en el Algarve; "por suerte me han salido las cosas bien. Pero aquí el fuerte es el equipo".

"Este partido nos da moral, confianza", continuó Valerón. Modesto hasta la exasperación, terminó el partido consolando a rusos desplomados en el césped como si les pidiera perdón. Con su gol, España ganaba el primer partido de la Eurocopa, algo que no lograba desde 1988. Pero ahí se le vio acariciando a Mostovoi, dando palmadas a Bulykin y abrazando a Smertin. El astro ruso Dimitri Sychev lo interrumpió para pedirle la camiseta, pero él no se la pudo dar. Quería dedicársela a su hermano, que estaba en la grada.

Hacia un lateral se fue tras el partido Valerón para buscar a su hermano. El autor del gol fue el más solicitado por los medios de comunicación. Tranquilo, en la misma puerta del vestuario, reflexionaba sobre lo ocurrido: "Era muy importante ganar el partido, que ha sido muy trabajado. Son tres puntos importantísimos. El primer balón que toqué fue gol. Pero es el equipo el que ha hecho un trabajo increíble. La primera media hora ha sido espectacular. Luego bajamos el ritmo y ellos se crecieron. Pero, al final, se hizo justicia".

Pese al juego desplegado, el gol tardó. Tuvieron que pasar 59 minutos hasta que llegó. Y tuvo que ser Valerón, un suplente, quien lo consiguiera: "Pero eso no es lo importante", declaraba con timidez; "siempre hemos controlado el partido y estaba claro que el gol iba a caer. ¿Euforia? No. Tenemos que mantener la calma porque aún no hemos hecho nada".

Feliz como estaba, Valerón sólo torció el gesto cuando se le comentó que quizá el gol conseguido pudiera abrirle las puertas de la titularidad. "Eso no importa", decía con rotundidad; "lo que cuenta es el apoyo que la gente le dé al equipo, no que ahora se abra un debate sobre quién debe o no jugar. En ese terreno, los medios de comunicación deben ayudarnos".

Si Valerón fue el hombre del partido por su gol, Vicente lo fue por su juego. El valencianista, que acabó exhausto, fue declarado el mejor jugador del partido. "El equipo ha sufrido mucho, sobre todo al principio", subrayaba antes de entrar en los vestuarios; "pero con el gol de Valerón se calmaron los ánimos. Aun así, en los últimos instantes sufrimos más de la cuenta".

Fue aquel el colofón a un encuentro que se complicó más de la cuenta y que en su inicio vivió una escena de alto valor emotivo, cuando los jugadores españoles saltaton al césped y oyeron el himno acompañados de alumnos del instituto de Santa Eugenia, una de las poblaciones de Madrid que fueron golpeadas por los atentados terroristas del 11-M.

Valerón y Vicente celebran el gol de España.
Valerón y Vicente celebran el gol de España.ULY MARTÍN
Raúl y Smertin chocan en un lance del partido.
Raúl y Smertin chocan en un lance del partido.ULY MARTIN
Pujol, acosado por los rusos Mostovoi (izquierda) e Izmailov.
Pujol, acosado por los rusos Mostovoi (izquierda) e Izmailov.EFE

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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