El puerto llevará este mes al Gobierno la ampliación y asume la posible pérdida de suelo por la Copa

El presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Rafael del Moral, anunció ayer que el 24 de junio presentará a Puertos del Estado, dependiente del Ministerio de Fomento, los planes de ampliación. El proyecto de expansión prevé ganar 73 hectáreas de instalaciones en Sagunto y 187 en Valencia. Del Moral defendió la necesidad de incrementar la superficie en la zona norte de Valencia para mantener el tráfico interoceánico.

El presidente de la APV, ante la posibilidad de que la financiación de la Copa del América implique la pérdida de suelo portuario para crear una marina urbana con zonas de ocio y viviendas, como defiende la alcaldesa, Rita Barberá, destacó que se trata de una cuestión que deberá decidir el Gobierno. El puerto, dijo Del Moral, "no pone un duro" en las obras y "no tiene voz" en este asunto. No obstante, apuntó que la financiación "puede hacerse de muchas maneras" y que los presupuestos del Estado aún pagan deudas de los Juegos Olímpicos de Barcelona. En caso de que el Gobierno, titular del suelo, decidiera una cesión para actuaciones urbanísticas, el puerto "tendría que acatarlo", añadió. Fuentes cercanas al consejo de administración, que se reunió ayer, explicaron que uno de sus miembros planteó su rechazo a la posibilidad de perder suelo de muelles para financiar la Copa y pidió que la APV reivindique que las posibles actuaciones no se realicen en detrimento del puerto y su actividad económica, una postura que comparten otros integrantes del consejo.

El consejo dio ayer el visto bueno a la cesión de terrenos en el Muelle de la Aduana para recrecer la dársena y preparar las prerregatas de la Copa este otoño, y aprobó el informe final sobre el estudio de impacto de los diques de abrigo del canal que se abrirá para los barcos de la competición. Del Moral explicó que el proyecto ha recibido 16 alegaciones y está pendiente ahora de la declaración de impacto del Ministerio de Medio Ambiente. Ante el debate de las alternativas y el impacto sobre la playa de la Malva-rosa, Del Moral dijo que la opción de orientar la bocana hacia el norte es "la más segura" para los barcos. Además, aseguró que el impacto sobre la playa es "absolutamente admisible" con medidas correctoras y similar a las alternativas de la Dirección General de Costas para orientar la bocana al sur. Del Moral negó que el diseño esté dirigido "a asegurar la ampliación" y remarcó que ésta es factible con las dos opciones. La obra supone "un bocado importante" a la ampliación norte, añadió.