Gesto por la Paz hace una defensa del pluralismo como modelo para la sociedad vasca
"Es necesario el esfuerzo de todos para recomponer la convivencia y para construir el futuro desde la aceptación de la pluralidad existente". Es, en palabras de Jesús Herrero, portavoz de Gesto por la Paz de Euskal Herria, la principal conclusión de las II Jornadas sobre Pluralismo y Convivencia que ha organizado esta coordinadora en San Sebastián.
En la mesa redonda celebrada ayer, con la participación del profesor de Filosofía de la Universidad de Zaragoza Daniel Innerarity, la parlamentaria socialista Gemma Zabaleta y el analista político Xabier Gurrutxaga, el primero planteó, en la línea marcada en su último libro La transformación de la política (Península), la idea de cómo hay que practicar la política para que ésta sea un modo de articulación del pluralismo social: "Cualquier política no vale para profundizar, respetar y articular el pluralismo, porque aquellas fórmulas políticas que preconizan la unidad frente a la diversidad no favorecen el pluralismo social". A su juicio, "la política debe ser una actividad limitada, abierta al compromiso y al acuerdo, en el que sea más importante buscar espacios de cooperación que la imposición unilateral de un punto de vista".
Zabaleta destacó el "daño y la contaminación" que ha causado la "excesiva duración del terrorismo" en Euskadi, donde "las conciencias se han militarizado y el debate político ha quedado hipotecado".
La parlamentaria socialista dibujó un escenario de "crisis creciente" en la política vasca. Por ello, abogó por "recuperar la política con mayúsculas y del sentido común", e invitó a la clase política a "ser capaz de pactar procedimientos, compartir valores y principios, para consensuar las leyes que afectan a la convivencia en una sociedad plural y desenredar la madeja en la que estamos".
Primera cita
La primera de las dos citas, titulada La pluralidad en una sociedad: riqueza e indefinición, reunió el pasado miércoles al escritor Bernardo Atxaga, la magistrada Gabiñe Biurrun y al profesor de la UPV Koldo Unceta. Atxaga detalló su modelo de ciudad vasca que ha acuñado con la denominación Euskal hiria, una suerte de cosmos sin exclusiones que englobe toda la pluralidad de identidades.
Biurrun hizo un llamamiento a los partidos políticos para que logren encauzar la unidad de la sociedad frente a la violencia. Unceta criticó a los representantes políticos por cegarse en la discusión sobre la identidad vasca, lo que, a su juicio, deslegitima y empobrece el pluralismo.