_
_
_
_
_

El Parlament encarga al Gobierno un informe sobre las ayudas a la prensa en los últimos 10 años

Maragall garantiza que su Gobierno aplicará una política de medios distinta a la de CiU

Enric Company

El Parlament encargó ayer al Gobierno de la Generalitat un informe sobre las ayudas a la prensa otorgadas en los últimos 10 años. Es decir, las concedidas por los últimos gobiernos de Jordi Pujol. El encargo, que deberá estar listo este año, incluye un informe sobre el reparto de frecuencias de radio y televisión durante el mismo periodo. El presidente Pasqual Maragall garantizó también ayer en el Parlament que las relaciones de los gobiernos de CiU con los medios de comunicación "son un modelo para no imitar" y que el actual Gobierno catalán está decidido a no seguirlo. Ese modelo, dijo, "desaparecerá".

El grupo parlamentario de CiU difundió hace casi un mes un informe anónimo, manejado por la Secretaría de Comunicación del Gobierno, sobre la orientación de los medios de comunicación y la situación financiera de algunos de ellos. La difusión del informe pretendía ser una acusación de intervencionismo lanzada contra el Gobierno y acabó provocando la dimisión del secretario de Comunicación, Miquel Sellarès. El líder de la oposición, Artur Mas, afirmó ayer en la sesión de control al Gobierno que la dimisión de Sellarès es una "confesión de culpabilidad". Josep Piqué, del Partido Popular (PP), pidió a Maragall que "ponga fin al espectáculo" protagonizado en las últimas semanas por su Gobierno en torno a este informe y a Sellarès.

Maragall respondió a los dos diputados de la oposición señalando la paradoja de difundir el citado informe "como si fuera un elemento acusatorio contra el Gobierno, cuando en realidad, en su contenido, era una elemento acusatorio contra el Gobierno anterior". Aunque no lo detalló, Maragall aludía a que el citado informe contenía, entre otras cosas, una descripción de la política de subvenciones y ayudas a la prensa llevada a la práctica por los gobiernos de CiU de forma discrecional y con criterios que los partidos del actual Gobierno consideran clientelares y partidistas.

El cruce de acusaciones sobre este asunto continuó en el debate de sendas mociones presentadas por CiU y ERC sobre la política de medios de comunicación. En este debate, que adquirió una inusitada dureza, intervinieron el convergente Felip Puig, el socialista Josep Maria Carbonell, el republicano Josep Huguet y el ecosocialista Joan Boada.

Felip Puig reiteró las acusaciones de "intervencionismo" y provocó que Carbonell le recordara que la política de medios de comunicación de los gobiernos de CiU se caracterizó por "el intervencionismo permanente, la opacidad y la discriminación", y además llevó a la Generalitat a perder nada menos que 128 millones de euros (21.000 millones de pesetas) en inversiones en Audivisual Sport y a acumular una deuda de 751 millones de euros (125.000 millones de pesetas) en la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), que gestiona TV-3 y las emisoras de radio de la Generalitat.

El debate finalizó con la aprobación de la moción presentada por ERC por la que se insta al Gobierno a elaborar antes de fin de año un informe "sobre las subvenciones, suscripciones y otros tipos de ayuda o publici dad que ha recibido la prensa diaria en los últimos 10 años".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

En la moción también se solicita un informe sobre "el proceso de reparto de las frecuencias de radio y televisión y su mapa actual", y otro sobre la nueva política de medios de comunicación.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_