Navajita Plateá graba 'El poder de la raíz' junto a Ariel Rot, Ana Belén y Mucho Muchacho

Navajita Plateá, el dúo jerezano formado por Ildefonso de los Reyes Pelé y Francisco Carrasco Curro, ha reunido en su nuevo disco, El poder de la raíz, a voces tan dispares como la Escolanía del Real Monasterio del Escorial, Ariel Rot, Ana Belén o el rapero Mucho Muchacho. Con este trabajo, el sexto en su discografía, los artistas aseguran que "hay canciones para todos los momentos del corazón". "Desde una crítica a la sociedad de la globalización y a los medios de comunicación, hasta un lamento de desamor que suena en Vagabundo", asegura Curro.

Con El poder de la raíz Navajita Plateá ha introducido dos cambios sustanciales en su trayectoria: las colaboraciones de otros artistas y su estreno con la discográfica internacional Sony Music. El dúo jerezano, que sacó su primer álbum en 1994 con Ariola y publicó después cuatro títulos con Emi, ha cambiado de compañía porque necesitaba "más proyección", apuntó Pelé ayer en Sevilla.

"Lo de las colaboraciones ha sido pura casualidad, ha surgido así. Por ejemplo, cuando estábamos grabando Beso blanco pensamos: aquí molaría la voz de Ana Belén. Así que, del tirón, le mandamos la maqueta y ella decidió venir. La cosa funcionó igual con Ariel Rot en Tus ojos", asegura Curro.

"Sin embargo, lo de Manzanita -que canta con Pelé el tema Pa' los pesares- fue de casualidad. Estábamos en Ronda, en el estudio de El Cortijo, cuando él apareció por allí", dice Pelé.

En Caballo de batalla, la canción que rezuma más crítica social de las 11 que presentan los jerezanos en su nuevo trabajo, la mezcla es explosiva: el rapero Mucho Muchacho y las voces angelicales de los 35 niños que forman la Escolanía del Real Monasterio del Escorial.

"La verdad es que nadie nos ha dicho que no a una colaboración, pero será porque siempre se lo pedimos a quien sabemos que le va a gustar", afirma Curro. En Caballo de batalla los músicos de Jerez (Cádiz) han compuesto dos partes. En la primera, aseguran que reflejan la realidad a ritmo de rap; mientras que la segunda, se acerca a la canción protesta.

El dúo confiesa que sus temas son siempre los mismos y giran en torno al amor y al desamor, pero que "de vez cuando" se ocupan de los pasa ahí fuera: de la sociedad.

Navajita Plateá, que arrasó en 1998 con Noches de bohemia, una canción que se incluía en su álbum Desde mi azotea, asegura que siguen siendo los mismos, aunque "más evolucionados". "Cada día aprendes cosas nuevas, te haces mejor músico, pero en el fondo somos los mismos", apunta Curro, quien se ocupa de la guitarra flamenca y la acústica. "No nos hemos parado a pensar si este disco es más o menos flamenco que los anteriores, porque para nosotros el flamenco es una forma de vivir. Nos levantamos flamencos, nos acostamos flamencos y roncamos flamenco", recalca Curro.

Navajita Plateá siempre ha querido estar cerca de sus fuentes, su propia familia, y desde el principio de su carrera se plantearon no mudarse de Jerez. "Cuando empezamos pasábamos muchas fatiguitas porque no había ni Ave, ni aeropuerto en Jerez. La gente que tocaba con nosotros tenía eso por delante", dice Pelé.

Los jerezanos comenzarán una gira por escenarios españoles a finales de junio, aunque aún no tiene cerradas las fechas. "A nosotros el mercado de copias ilegales de discos nos afecta como a todos, pero les afecta más a las discográficas. Aunque se venda mucho menos, siempre nos queda la esperanza del directo", concluye Curro.