Barakaldo triplicará el presupuesto para inversiones

El Ayuntamiento de Barakaldo triplicará este año el presupuesto destinado a inversiones, que sumará 27 millones de euros. El alcalde, el socialista Tontxu Rodríguez, presentó ayer las nuevas cuentas municipales, que quedarán aprobadas el jueves tras el pacto cerrado con el PP. Agregó que los populares se incorporarán al equipo de gobierno a inicios de junio, donde tendrán tres concejalías frente a las cinco del PSE, además de la alcaldía.

Barakaldo, la mayor ciudad de Euskadi en que PSE y PP han logrado cerrar un pacto de gobierno, dispondrá así de un presupuesto por vez primera desde 2001. Las prórrogas de las cuentas de los últimos años habían llegado a afectar seriamente a la gestión, como admitió ayer el primer edil. "No podíamos continuar un día más sin presupuestos", destacó. Incluso había impedido la apertura de servicios concluidos, como el nuevo polideportivo de Lasesarre, que permanecía sin inaugurar al faltar una partida para su mantenimiento.

El nuevo presupuesto ascenderá a 104 millones de euros, frente a los 69 millones con los que la localidad ha funcionado cada uno de los últimos cuatro años. Rodríguez explicó que el 32% se destinará a inversiones en los barrios e infraestructuras; otro 32% al mantenimiento de la localidad; el 33%, a gasto social y el 3% restante, para la protección y seguridad ciudadana. El alcalde precisó que la mejora de los barrios es una de las principales apuestas

, con 7,5 millones para las 75 actuaciones previstas.

Rodríguez, en la primera comparecencia en que comentó el acuerdo con el PP, recalcó que en los últimos diez meses había intentado cerrar un pacto con el resto de partidos. Aplaudió "el interés y la disposición" de IU y criticó con dureza a la coalición PNV-EA, de la que dijo que ha "cometido un error con mayúsculas" por "sus conflictos internos y la falta de liderazgo".

El portavoz de la coalición nacionalista, José María Lekue, calificó el pacto de "esperpéntico" por los continuos ataques que socialistas y populares se han prodigado los últimos meses o la "disparidad de criterios" en cuestiones como los impuestos, la OTA o proyectos urbanísticos. Lekue auguró que el acuerdo no tendrá estabilidad y ello "pasará factura al pueblo de Barakaldo".