Ambiente olímpico en 'La Peineta'

Todo está preparado. Suena un himno y vibran las gradas. Anuncian su nombre y Ana sube al podio entre aplausos. Nerviosa, rodeada de cámaras, saluda con una amplia sonrisa mientras recibe una medalla de oro en la disciplina de salto de longitud. Una ceremonia propia de los Juegos Olímpicos, si no fuera porque Ana tiene 12 años y sus fans son niños y jóvenes de 147 colegios de toda la Comunidad de Madrid.

La intención era crear un ambiente olímpico para los aproximadamente 5.000 chicos y chicas de entre 10 y 17 años que ayer asistieron en La Peineta al Primer Encuentro Deportivo Estadio de Madrid. Un evento donde no sólo se ofrecía atletismo en vivo, sino también juegos, actuaciones, música y concursos. Todo ello con una incógnita de fondo: ¿pasará Madrid el corte del Comité Olímpico Internacional (COI)? Para despejar las dudas en directo, una pantalla gigante en el fondo del estadio conectará con Lausana (Suiza) a la hora prevista para dar la noticia.

Los pequeños atletas tratan de concentrarse, tarea difícil por la presión del graderío y la fuerza de la megafonía. A 500 de los niños y niñas les toca competir en las disciplinas de salto de longitud, de altura, y en carreras de 60 y 1.000 metros lisos. Son los que hicieron las mejores marcas en las mismas pruebas cuando visitaron el estadio con sus colegios por primera vez. Desde octubre de 2003, más de 10.000 escolares madrileños han visitado las instalaciones, una iniciativa que ayer culminó en la celebración del Encuentro Deportivo.

Lucía e Irene, del Colegio Paraíso Sagrados Corazones de Madrid, son dos de los finalistas. Deambulan por la pista de atletismo, bajo un sol abrasador, esperando su turno para competir. Tienen 15 años y su disciplina es el salto de altura. "Estamos muy nerviosas", dicen, mientras miran hacia el graderío con cierto temor. Los chicos gritan y la megafonía les impide concentrarse. "Cuando saltemos, miraremos hacia las gradas que no están construidas [las tres cuartas partes del estadio] para relajarnos", comentan entre risas. Al igual que la mayoría de sus compañeros, no se han entrenado antes ni se dedican al atletismo en su tiempo libre. Todavía quedan algunas horas hasta que salten y la tensión ya se percibe.

Mientras tanto, los chavales que no están en competición se divierten jugando al fútbol o al hockey, entre otros deportes. Pero no todo es actividad física. La creatividad y la conciencia medioambiental son también protagonistas en La Peineta.

A iniciativa de la Oficina Madrid 2012 y de la Consejería de Medio Ambiente, el encuentro deportivo también lo debe ser de respeto a la naturaleza. Por ello, los asistentes no sólo optan a medallas por correr y saltar; también lo hacen a premios por su creatividad. Como por ejemplo, en el concurso de paneles y lemas que relacionen la candidatura de Madrid con el respeto al medio ambiente. Lemas como Naturaleza y deporte, el perfecto equilibrio o Si cuidamos el planeta, veremos buenos atletas adornan el interior del estadio. También se ofrece un trivial con preguntas relacionadas con el medio ambiente, y para los más pequeños, las actuaciones de los payasos del reciclaje, que de forma amena explican qué tipo de residuo debe tirarse en qué tipo de contenedor.

Carreras sin rumbo

Son muchos los niños que participan, pero la mayoría simplemente corre sin rumbo en las entrañas del estadio gritando sin parar. Sus profesores parecen estresados, tienen que vigilar a sus alumnos y éstos tienen la habilidad de desaparecer cuando menos lo esperan. "Estoy vigilando lo que puedo", reconoce Eva, profesora de una clase de primaria del colegio San Javier. Sus alumnos tienen entre 11 y 12 años y, según ella, "se están portando bien. Estaban emocionados". Sin embargo, reconoce que, más que competir, "lo que quieren es jugar".

Se acerca la hora de mirar a la pantalla gigante para conocer la decisión del COI, y las gradas empiezan a llenarse más y más. Las actividades cesan paulatinamente y la atención se traslada a Suiza.Todo va muy deprisa. En la pantalla aparece un funcionario del COI que lee la lista de las ciudades que pasan el corte: Nueva York, París, Londres, Moscú y... Madrid. Unas 5.000 personas gritan de alegría y uno de los payasos corre por la pista para abrazar a los que encuentra en su camino.

Siguen los juegos, pero esta vez hay una excusa que celebrar. "Estoy muy ilusionado con que se puedan celebrar los Juegos Olímpicos en mi ciudad", explica un chico de 11 años, pero a la pregunta de qué ha sido lo mejor del día, reconoce sin dudar: "Que hoy no hemos tenido clase".