La muerte según Zanussi

Valencia

El intelectual y director de cine Krzysztof Zanussi (Varsovia, 1939) presentó ayer en Valencia La vida como una enfermedad mortal de transmisión sexual, su última película, inédita en las pantallas españolas, dentro del homenaje que el Simposio de Internacional de Cine organizado por la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir le ha tributado. La película, un estremecedor relato sobre la agonía de un hombre acostumbrado a tratar cara a cara con la muerte, sirvió para redescubrir, en el marco de un congreso que relaciona el cine con los valores cristianos, a un director que intenta con su obra "compartir con el espectador mis angustias y mis dudas, porque el cine es sólo un arma muy pequeña para cambiar la sociedad", según sus propias palabras.

Zanussi, que por la tarde impartió una conferencia sobre el tema La educación de las distintas dimensiones de la persona y el cine, recibió el año pasado el premio Robert Bresson de la Bienal de Venecia por una trayectoria cinematográfica que comenzó a mediados de los años sesenta. El director dice sobre su trayectoria: "Ha hecho mucho por el cambio político y social en Polonia, pues la incoherencia de la ideología política en mi país era muy grande y las películas de los cineastas de mi generación sirvieron como método para despertar la conciencia nacional". El director polaco, que actualmente imparte clases en la Escuela Superior de Cine de Cracovia y es consultor del Consejo Pontificio de Cultura de la Santa Sede, es el máximo representante de un cine cristiano que busca "examinar la ética privada y pública", según su definición, "y que ha tenido la suerte de ver cómo la guerra en Polonia, que marcó a toda la generación de directores anterior, acababa mucho más tarde de lo que la gente cree: hace sólo dos semanas, con la incorporación a la Unión Europea".