Carlinhos Brown viste hoy el paseo de Gràcia de carnaval brasileño
El Ayuntamiento de Barcelona recomienda acudir a la fiesta a pie o en metro
Respeto, diversidad, diálogo e integración son las cuatro palabras que resumen la idea de trasladar a pleno centro urbano de Barcelona un caravana entera del carnaval de Salvador de Bahía. Al frente del colorido espectáculo, que se espera que sea uno de los actos más multitudinarios del Fórum, está Carlinhos Brown. Esta Carnavalona, que recorrerá el paseo de Gràcia a partir de las 18.00 horas y durará tres horas, obligará a cerrar dicha vía, en la que estará prohibido estacionar. El Ayuntamiento recomienda acudir a pie a la fiesta o usar el metro, evitando las bocas del paseo de Gràcia. El acceso y la salida de los aparcamientos subterráneos de dicha vía estarán restringidos.
Los dos protagonistas de la presentación de la fiesta fueron ayer Carlinhos Brown, que vestía uniforme de músico -bermudas, camiseta naranja, collares de bisutería, descomunal gorro de lana que ocultaba su melena, gafas de sol y chanclas con calentadores enroscados al final de las piernas-, y el alcalde de Barcelona, Joan Clos, todo pulcritud, traje oficial de cargo público con corbata de rayas e impecable peinado. Ambos se fundieron en un prolongado abrazo que pudo ser leído como un acercamiento entre dos mundos. Esta tarde, a partir de las 18.00, esos dos mundos y muchos más coincidirán en pleno paseo de Gràcia.
En una de las naves de la Fira 2, en L'Hospitalet, Carlinhos Brown y su equipo, formado por 60 personas, realizaban ayer los últimos ensayos. Un gigantesco camión -de 26 metros de largo por 4 de ancho y 5 de alto- parecía en aquel recinto un minúsculo biscúter. Viajó por mar desde Bahía a Bilbao, y luego por carretera hasta Barcelona. Por delante de la cabina, una plataforma monta tres bombos para un percusionista. Tras la cabeza tractora del camión, estadounidense, hay una especie de tómbola o churrería plateada del siglo XXII llena de luces con una cabina de sonido en su parte central, una terraza para invitados en la superior y lavabos, sofás para que descansen los músicos y unos altavoces que, como dijo Carlinhos Brown, "unen la tecnología antigua con la digital intentando demostrar que todo puede convivir en un mismo mundo". Todo ello rematado con una especie de cabeza de pez, que Carlinhos Brown dijo que estaba "inspirada en los reptiles de Gaudí", cuyos ojos son pantallas de vídeo. Este camión fue probado en los últimos carnavales de Salvador de Bahía y esta tarde sembrará de vatios el centro de Barcelona, precedido por una cohorte de 40 músicos y de personal auxiliar disfrazados de dragón.
Carlinhos Brown enseñó con detalle el camión a Clos, quien practicó como percusionista y aprendió algo de portugués. "¿Qué es sambar?", preguntó el alcalde cuando fue requerido para que lo hiciese. Carlinhos Brown, atento y considerado, respondió que bailar, pero excusó al alcalde de hacerlo allí mismo, porque "el baile es algo libre y sin normas, y cada uno lo hace como y cuando quiere". Más tarde, en el interior del camión, Clos dejó volar su curiosidad y preguntó a Carlinhos si conocía a Ronaldinho y si sabía si éste participaría en el carnaval. Nada mejor que la sonrisa del astro del fútbol para alegrar el Fórum, debió de pensar la autoridad municipal. Carlinhos Brown, enfrascado en enseñar mesas de sonido, altavoces e instrumentos, ni oyó la pregunta. La que sí oyó fue otra que le dejó perplejo: "¿Por qué has hecho una versión en clave de samba de Els segadors?". "¿Cómo sabéis eso?", preguntó sorprendido, y a continuación explicó que "se trataba de una sorpresa, una forma de acercar las tradiciones de dos pueblos que, pese a todo, son latinos en su raíz".
Transportes Metropolitanos de Barcelona reforzará el servicio de metro para facilitar los desplazamientos de los ciudadanos. Las estaciones de metro recomendadas para llegar al carnaval son las de Catalunya, Urquinaona, Universitat, Fontana, Verdaguer, Girona y Diagonal. En la esquina del paseo de Gràcia con la calle de la Diputació se habilitará una zona para personas con movilidad reducida. Esta misma calle, entre el paseo de Gràcia y Pau Claris, se reservará para el estacionamiento de vehículos de personas con disminución.
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