CDC limitará a ocho años los mandatos a todos sus dirigentes excepto el presidente

Convergència Democràtica (CDC) se ha propuesto que su congreso de julio, el 13º, sea el de la refundación, sobre todo en cuanto a la estructura interna, porque respecto a las ideas continuará siendo una formación nacionalista de carácter identitario que aspira a recuperar la condición de pal de paller. El secretario general de CDC, Artur Mas, presentó ayer los borradores de las cuatro ponencias, que presentan amplias novedades: limitación de mandatos a ocho años excepto para el presidente, Jordi Pujol; rígidas normas de incompatibilidades, y refrendo electoral de los cargos ejecutivos.

CDC pretende obtener 1,5 millones de votos en las autonómicas de 2007, una meta imprescindible para reconquistar el Gobierno catalán y "reencontrarse" con la condición de pal de paller. La fórmula que quieren explorar los convergentes para "recuperar plenamente la centralidad política" consiste en lanzar un "discurso claramente soberanista y progresista" que no suponga, aclaró Mas, un "viraje hacia la izquierda" y en "tender puentes" a los electores socialistas y republicanos.

Los principios de CDC seguirán basándose en el nacionalismo de carácter identitario y en los conceptos de nación y progreso, según consta en la ponencia política, pero adaptándolos a la nueva y difícil etapa política: relevo de Jordi Pujol, pérdida del Gobierno catalán y declive paulatino del apoyo electoral.

Estos propósitos, no obstante, caerán en saco roto si Convergència no cuenta con la colaboración de sus socios de Unió. Por este motivo, los convergentes apuestan por estrechar los lazos en el seno de la federación nacionalista hasta conseguir que CiU actúe como una sola fuerza política incluso en el discurso, lanzando un mensaje "soberanista y progresista".

Consciente del rechazo que cualquier proceso de fusión genera en los democristianos, CDC aboga por una "plena conjunción" que signifique, por ejemplo, agrupar las direcciones territoriales y sectoriales, o posibilitar la militancia directa en CiU. Esta nueva estrategia se pondrá a prueba en las elecciones municipales en Barcelona: "Si no ganamos en Barcelona, no consolidaremos nuestro hegemonía territorial", se afirma en la ponencia.

Por primera vez, CDC ha puesto nombre al modelo administrativo que anhela para la España "plurinacional". CDC defenderá un Estado confederal que suponga la "convivencia de diferentes naciones en plena igualdad".

Las modificaciones más sustanciales afectarán a la estructura organizativa del partido. Jordi Pujol y Artur Mas continuarán como presidente y secretario general, respectivamente. Pero desaparece la secretaría de organización y la secretaría general adjunta. A cambio, se crean seis vicesecretarías generales y otras cinco ejecutivas. Las primeras están abiertas a candidaturas y serán votadas de forma unipersonal en el congreso. Las segundas vicesecretarías, con paridad entre hombres y mujeres, las propondrá Mas y serán votadas en bloque.

Además, los miembros de la ejecutiva, que sólo permanecerán ocho años en la dirección a excepción del presidente, no podrán ocupar al mismo tiempo dos cargos institucionales. Esta restricción afecta, por ejemplo, a los presidentes de las diputaciones de Tarragona y Lleida.

La ponencia territorial propone un nuevo sistema electoral que permita la "elección directa del alcalde" para la lista más votada y limita los mandatos a dos de seis años, pero sólo en las poblaciones más importantes.