La crisis de IU se agrava tras la dimisión de la dirección de Córdoba

La crisis en IU tras los resultados del 14 de marzo no hace más que agravarse. En Córdoba, el coordinador local, Francisco Cívico, ha dimitido y, con él, 24 miembros del consejo local, que ha quedado disuelto. Un grupo de trabajo formado por cuatro personas de la formación se encargará de perfilar la nueva dirección municipal de IU, que será ratificada en una asamblea extraordinaria el 26 de junio.

La decisión de Francisco Cívico llega después de que la corriente crítica, liderada por el alcalde de Puente Genil, Manuel Baena, rehusara formar parte de la nueva Comisión Permanente dispuesta por el coordinador provincial, Enrique Centella, quien obtuvo el cargo en la última asamblea al imponerse al propio Baena. Cívico, perteneciente al sector crítico, explicó que ya tenía pensada su renuncia antes de esta circunstancia.

Las razones de Cívico, que permanecerá como miembro de la Ejecutiva y el Consejo Provincial de IU, son principalmente la deriva de la formación tras los resultados del 14 de marzo. Para Cívico, después del varapalo electoral, "no hay discurso" y la formación "está escorada al PSOE", por lo que la "gente no te ve útil" y la "militancia no está ilusionada".

Tras el 14 de marzo, los pasos que ha dado la formación en el ámbito nacional, regional y provincial, han sido los motivos esgrimidos por Cívico para abandonar como responsable local.

Hechos como que Willy Meyer concurra a las elecciones europeas o que el "100%" de la dirección provincial actual sea afín al actual coordinador, Enrique Centella, han provocado la salida de Cívico, según explicó. Diez miembros del sector crítico, junto a Manuel Baena, que lidera la corriente, declinaron formar parte en la Comisión Permanente establecida el miércoles. "La sensación es de desilusión y así no merece la pena seguir", sentenció Cívico.

Francisco Cívico restó importancia a una de las razones que ha traslucido sobre su salida: la falta de sintonía con el equipo de Gobierno municipal y la falta de peso del órgano que dirigía en las líneas políticas del grupo municipal. "Es cierto que con el grupo ha habido diferencias, pero no es el motivo", dijo. "A lo mejor, no nos hemos entendido bien y puede que yo tenga mi parte de responsabilidad", agregó.

El primer Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Córdoba, Andrés Ocaña, dijo ayer que no ha habido "ningún problema" con la dirección local ni "elementos de no sintonía". Ocaña afirmó que en estos "momentos difíciles" es necesario "arrimar el hombro". Ocaña disintió de la decisión de los críticos, corriente a la que pertenece, de no integrarse en la Comisión Permanente. "No debía haber sido así", concluyó.

El coordinador provincial de IU, Enrique Centella, eludió ayer comentar las razones esgrimidas por Francisco Cívico e incidió en que realizó un esfuerzo para que no se produjera la salida de toda la coordinadora local. A pesar de la dimisión en bloque y de que la reestructuración local del partido se emplaza a finales de junio, Centella dejó claro que "no habrá desgobierno en Córdoba" y agregó que es necesaria la "prudencia" y "facilitar el trabajo a la gestora".