El Fòrum-Ciutat programa 141 espectáculos con un coste de 15 millones
El director del festival considera que el público puede asumir la propuesta
El Fòrum-Ciutat, todo un festival de música, teatro, danza y otras actividades culturales que se desarrollará en la ciudad de Barcelona fuera del recinto del Fòrum y al margen de lo que pueda verse en éste (y para el que hará falta adquirir las correspondientes entradas), ofrece 141 espectáculos, tantos como días tiene la gran cita barcelonesa, de acuerdo con la programación presentada ayer. La dirección estima que la oferta, llena de grandes nombres internacionales, es "humana" y "soportable por el público y sus bolsillos".
La organización considera que cada día habrá al menos una o dos cosas "muy atractivas" para ver en el Fòrum-Ciutat.
La programación, que se desarrollará en varios espacios de la ciudad y tiene un presupuesto de unos 15 millones de euros -de los que 9 los paga el Fòrum, 2 el municipal Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB) y el resto otras instituciones y empresas-, es una avalancha de nombres de primera fila de la creación internacional e incluye a Mstislav Rostropóvich, Pina Bausch, Sting, Phil Collins, Barenboim, Norah Jones, Leny Kravitz, Juliette Gréco, Bob Dylan, Robert Wilson, Peter Sellars, Robert Lepage, Peter Brook, Khaled, Baryshnikov y el Cullbert Ballet. Del programa, 61 producciones son nuevas, lo que convierte el festival "en un acontecimiento de creación".
El núcleo del programa del Fòrum-Ciutat es un festival Grec alargado y agrandado soberanamente. Diferentes instituciones, centros e iniciativas públicos y privados de la ciudad colaboran en el programa, y así se incluyen en el mismo, enteros o en parte, el festival Sónar -que dedicará dos sesiones al Fòrum-, el Maratón del Espectáculo, la fiesta internacional de la literatura Kosmopolis, el VIII Festival Internacional de Música Experimental LEM y hasta las populares fiestas del barrio de Gràcia. El Liceo, el Teatre Nacional de Catalunya (TNC), el Teatre Lliure, el Mercat de les Flors, el Palau Sant Jordi, el anfiteatro Grec, el Palau de la Música, el teatro Romea y el Auditori o La Paloma (con un programa de cabaret) son algunos de los escenarios donde se concentrarán las actuaciones. En total, 20 espacios de la ciudad (sin contar la calle) acogerán actividades.
Entre éstas, "una movida enorme" en el puerto y La Rambla, que incluirá un desfile de bandas de metal con 3.000 músicos y un combate sonoro entre sirenas de barco y campanas, una ópera contemporánea sobre 1714, un gran homeneje a Pablo Neruda orquestado por Víctor Manuel, una obra sobre los hechos de Génova durante la agitada cumbre del G-8, otra sobre la anorexia, una versión escénica de Yo, Claudio, con Héctor Alterio, y una Orestiada dirigida por Mario Gas.
El director de la programación de espectáculos del Fòrum-Ciutat, Borja Sitjà, dijo que debe verse este cúmulo de actividades como un verdadero festival (aunque oficialmente no lleve este nombre) y no como una suma de ingredientes al azar. La programación, dijo, "tiene una misión en el Fòrum, que es abrir un espacio a los artistas para que participen en el diálogo con lo que ellos hacen mejor, que es su arte". Sitjà consideró que 141 espectáculos "no son tantos". Y añadió: "No es una explosión de oferta excesiva que provoque luego una resaca terrible en la ciudad; es un programa humano y asumible para el público y sus bolsillos".
Sitjà insistió en que se ha tratado de ajustar el programa a la realidad: "No podemos pensar que vendrán cinco millones [de visitantes] más de los que vendrán. El festival está pensado para los que somos, con un poco más de ganas".
El programa empezará el 14 de mayo en el Auditori con el Réquiem de guerra, de Britten, con dirección de Rostropóvich. Junto a éste, otros cuatro espectáculos marcarán de entrada la tónica del festival, según su director. Se trata de la nueva producción del teatro ecuestre Zingaro, Loungta, que se basa en la cultura tibetana; el carnaval de Salvador de Bahia, con Carlinhos Brown, que discurrirá por el paseo de Gràcia, y se espera que congregue a 100.000 personas; la "maravillosa" coreografía de Pina Bausch Para los niños de ayer, hoy y mañana, y la versión para escena de Homage to Catalonia de Orwell. Tras este "pistoletazo de salida", dijo, "ya no paramos".
Sitjà destacó, entre otras muchas cosas, la presencia por primera vez en Barcelona de Frank Castorf dirigiendo una adaptación de Dulce pájaro de juventud, de Tennessee Williams; el Rey Lear de Calixto Bieito, la epopeya indonesia I La Galigo, llevada a escena por Bob Wilson, y La Celestina de Lepage con Núria Espert o la actuación de Enrique Morente.
Expresión de un mundo sin fronteras
La confección del programa ha dado prioridad a unas "reglas del juego", explicó ayer el concejal de Cultura, Ferran Mascarell. "Que el festival fuera una propuesta global y coherente, que tuviera un punto de excepcionalidad y expresara un mundo sin fronteras".
Del hecho de que en el mes de agosto el festival quede reducido a su mínima expresión, Sitjà señaló que el Teatre Grec tendrá actuaciones hasta el 20 de ese mes, pero reconoció que "efectivamente hay menos actividad", lo que consideró "lógico". Destacó que, en cambio, el recinto del Fòrum continuará funcionando igual, con sus espectáculos. De la escasa presencia de las salas alternativas (sólo Beckett y Espai Brossa), dijo que no se puede "superproducir" y que "en cambio hay una presencia extranjera muy potente. Hubiera sido un error salir con 250 espectáculos". Sitjà volvió a insistir en que la caída de la programación del esperado Hamlet de Lluís Pasqual ha sido consecuencia de que el director "consideró que las condiciones artísticas no le convenían, y contra eso no puedo hacer nada".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.