Dos jueces de la Audiencia Nacional pugnan por investigar la explosión de Leganés

Los jueces de la Audiencia Nacional Juan del Olmo, instructor del atentado del 11-M, y Teresa Palacios, magistrada de guardia el día de la explosión de Leganés, mantienen desde el martes una dura pugna por la competencia sobre los sucesos de la localidad madrileña que desembocaron en el suicidio de siete islamistas radicales y la muerte del geo Javier Torronteras. El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, avanzó ayer su postura favorable a la juez Palacios, por considerar que la acumulación de procesos que dan lugar a macrosumarios son perjudiciales para la instrucción.

La pugna por la competencia sobre los hechos de Leganés no se limita sólo a cuestiones formales sobre la disputa de los sumarios de los atentados del 11-M y los sucesos de Leganés, sino que discurre de forma paralela a determinadas cuestiones personales entre algunos jueces centrales de instrucción de la Audiencia Nacional.

Fuentes de la Audiencia sitúan el origen del problema en la actitud "excluyente" del juez Del Olmo, que habría denegado toda información a otros magistrados que instruyen causas sobre terrorismo islamista anteriores a los atentados del 11-M e incluso habría prohibido a la policía responder a las peticiones de información de otros jueces.

El sábado 3 de abril, día de los sucesos de Leganés, la juez Palacios estaba de guardia, se había hecho cargo del intento de voladura del AVE, había autorizado la intervención de un móvil con tarjeta prepago que podría ser de alguno de los terroristas y autorizó a la policía la entrada y registro en el piso de la calle de Carmen Martín Gaite de Leganés. Como juez de guardia, Palacios se hizo cargo de los hechos que rodearon a la explosión, incluida la identificación de los siete terroristas, la muerte del geo y la destrucción del edificio.

El pasado martes, el juez central número 6, Juan del Olmo, dirigió un oficio a su compañera del central 3, Teresa Palacios, pidiéndole que le remitiese testimonio de los efectos intervenidos en el piso de Leganés. Palacios respondió con otro oficio indicando que los sucesos de Leganés eran de su competencia. Al tiempo, pidió un informe al ministerio fiscal explicando sus razones.

Ante la negativa de Palacios, Del Olmo reaccionó dictando un auto en el que requiere formalmente de inhibición a Palacios, por considerar que lo sucedido en Leganés son hechos vinculados o conexos con los que investiga él.

Según fuentes jurídicas, la magistrada del Central 3 está a la espera del informe de la fiscalía, pero todo apunta a que mantendrá su competencia sobre los hechos de Leganés. En ese sentido, el fiscal jefe de la Audiencia, Eduardo Fungairiño, avanzó ayer su criterio favorable a la juez Palacios, por entender que los procesos se deben individualizar y que la acumulación de causas que dan lugar a macrosumarios es perjudicial para la instrucción. Fungairiño apuntó además que existe la posibilidad de que algunos de los que se inmolaron en Leganés no participaran en los atentados del 11-M, lo que abonaría la línea de investigación de la juez Palacios. Otras fuentes de la Audiencia indicaron que se trata de una causa independiente.

Si como parece previsible, la juez Palacios, con el apoyo del fiscal, no se inhibe en favor de Del Olmo, éste tendrá que plantear una cuestión de competencia, que deberá ser resuelta por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.

En cualquier caso, los efectos hallados en Leganés por la policía y que reclama Del Olmo no habían llegado ayer a la Audiencia Nacional. Entre estos está el disco duro de un ordenador McIntosh que podría tener abundante documentación; la cinta de vídeo con un mensaje grabado por los terroristas y la sábana que aparece de fondo en la filmación.