"La canción lucha contra la soledad porque dan ganas de compartirla"
El segundo trabajo del argentino Coti Sorokin, estrenado el pasado 1 de marzo, se titula Canciones para llevar. El primer single, Bailemos, lleva formato de tango. Después de componer y producir a importantes grupos y solistas de Argentina, decidió, hace dos años, instalarse en España para elaborar su propio proyecto.
Pregunta. ¿Recuerda su primer contacto con la música?
Respuesta. Viví en una familia a la que le gustaba mucho la música y eso te marca. A los 10 u 11 años comencé a estudiar guitarra por motivación de mis padres. Desde entonces nunca paré de estudiar, ni de manera académica ni callejera. Ahora ya es como una obsesión.
P. Sacó su primer disco hace dos años, ¿por qué esperó tanto?
R. Realmente publiqué un álbum cuando era un chaval, tenía un grupo de música instrumental. Luego estuve trabajando mucho tiempo para los demás porque tenía que subsistir y aprender, tratar de comer de la música. Conocí a un montón de artistas y productoras pero por falta de tiempo no podía dedicarme a hacer mi proyecto.
P. ¿Cuándo decidió que era su momento?
R. Me costaba mucho decir que no a los encargos que me llegaban hasta que hubo un momento en que paré y me dediqué a grabar mi disco. Lo grabé en Argentina y lo edité en España.
P. ¿Por qué se marchó de Argentina? ¿Le empujó la crisis económica?
R. La crisis en Argentina se vive desde hace años, desde que yo recuerdo. La preparación de mi venida fue anterior al desastre de hace unos años. Necesitaba cambiar de aires y buscar lugares nuevos.
P. ¿Qué encontró en España?
R. Encontré mucho respeto, mucha gente que disfruta de nuestra música y nuestra cultura. Me sentí muy cómodo.
P. ¿Cómo funcionó su primer disco?
R. Yo nunca esperé nada anormal, vender millones de discos y forrarme. Lo que quería era hacer conciertos, acercarme al público y convencerlos uno a uno.
P. ¿Por qué ha titulado su segundo disco Canciones para llevar?
R. Define cómo fueron creadas las canciones, yendo y viniendo. Además expresa las ganas de que la gente que las escucha las haga propias y las lleve consigo. A diferencia de otras manifestaciones artísticas, la canción lucha contra la soledad porque dan ganas de compartirla.
P. He leído que la grabación de su disco ha sido muy particular.
R. Sí. Buscaba captar de manera espontánea la grabación de las canciones y la única forma de hacerlo era como hace 30 años, con todos los músicos tocando a la vez. Cuando terminé de componer empezamos a ensayar, luego montamos todos los instrumentos y grabamos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.