Repercusiones internacionales del 11-M / 2

La enorme maquinaria de propaganda de los Estados Unidos se ha puesto en marcha contra España. Con todo lo que ello conlleva. Acabo de leer afirmaciones terribles pronunciadas por distintos miembros de la clase política y de la Administración de Bush y, ya desde el primer momento, se percibe la burda manipulación a la que quieren someter a la opinión pública mundial en contra de la decisión de retirar las tropas españolas de Irak.

Primero, quieren hacer ver que la intención de retirar las tropas es consecuencia de los atentados del 11-M, ignorando la verdad: que Zapatero prometió antes de los atentados la retirada.

Segundo, tratan de tachar de cobardes a los españoles, ignorando que nosotros nos opusimos frontalmente a la guerra a la cual nos avocó unilateralmente el Sr. Aznar. Dicha afirmación se comprendería si hubiésemos apoyado la guerra y después de la tragedia en Madrid nos quisiéramos retirar, pero no si se tiene en cuenta que el pueblo español jamás apoyó la invasión.

Tercero, lo más terrible: el candidato Kerry ha asociado la retirada de las tropas con la conversión de España en un "santuario" terrorista.

Inadmisible. Intolerable. ¿Acaso no ha demostrado España durante décadas su decidido apoyo a la lucha contra el terrorismo? No podemos tolerar estas acusaciones tan graves y tan falsas de aquellos que manifiestan ser "nuestros aliados".

Cuarto, el candidato Kerry ha apelado a la responsabilidad que tiene España en lo que nos están acostumbrando a denominar "reconstrucción" de Irak. Mi pregunta es: ¿se puede denominar "reconstrucción" a una situación de caos, desabastecimiento, mortandad, atentados diarios... todo ello provocado sobre la base de mentiras y manipulaciones?

Quinto, algunos líderes, como el ministro de Defensa británico, están tratando de manipular las palabras de nuestro futuro presidente sobre la retirada. El Sr. Zapatero ha dejado muy claro que retirará al Ejército de Irak si la ONU no se hace cargo de la situación del país, lo cual es muy diferente de lo que pretenden los ingleses, que han realizado su particular interpretación en el sentido de que bastaría una resolución para justificar nuestra presencia allí. Sres. de EL PAÍS, Sr. Zapatero, Sres ministros del futuro Gobierno de España, por favor, no consientan que el verdadero presidente a la sombra de nuestra patria sea el presidente de turno de los Estados Unidos. Se lo ruego en nombre de miles de ciudadanos soberanos. Distáncienos de la guerra, independientemente de Bush e independientemente de Al Qaeda.