César Alierta se siente "relativamente joven" para continuar al frente de la operadora
César Alierta se siente seguro al frente de Telefónica. El máximo responsable del grupo aseguró ayer en São Paulo (Brasil) que está "contento" de ser presidente de Telefónica y que se siente "relativamente joven" para seguir siéndolo. Con el próximo Gobierno socialista colaborará "proactivamente" para que tenga éxito, aunque recordó que hay asuntos pendientes como que se reparta entre todos los operadores el coste del servicio universal. Alierta se mostró convencido de que Telefónica seguirá siendo el líder "de lejos" de Latinoamérica pese a las últimas operaciones del empresario mexicano Carlos Slim, que le disputa ese puesto.
El propio Alierta se encargó de enfatizar que ésta es casi la misma respuesta que les dio a los periodistas cuando hace dos semanas le preguntaron por su continuidad con el nuevo Gobierno que se suponía que iba a formar el candidato del PP, Mariano Rajoy, tras las elecciones. "Nada ha cambiado desde entonces", dijo.
Alierta asumió la presidencia de la operadora en julio de 2000, con la compañía ya privatizada, relevando a Juan Villalonga, que se vio forzado a renunciar al cargo por la pérdida del apoyo del Gobierno tras una controvertida gestión y el escándalo de las opciones sobre acciones (stock options). El mismo Ejecutivo confió a Alierta cuatro años antes la presidencia de la entonces empresa pública Tabacalera, con el apoyo del ministro de Economía, Rodrigo Rato.
Pese a que ha viajado a São Paulo para clausurar una convención de directivos de la compañía en Latinoamérica, Alierta no esquivó la pregunta sobre la opinión que le merecía la victoria del PSOE en los comicios y las consecuencias que iba a tener para la economía española. "Le deseo todos los mayores éxitos al Gobierno español, y Telefónica colaborará proactivamente para que ese éxito se convierta en una realidad y haremos lo que siempre hemos hecho para ayudar al desarrollo económico de España".
Alierta tuvo un emocionado recuerdo para los cuatro empleados del grupo que fueron asesinados en el atentado terrorista de Madrid. "Ha sido el día más doloroso de mi vida. La muerte de cuatro personas, buena gente que iba a trabajar a las 7.30 es lo más trágico que nos ha podido pasar".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.