_
_
_
_
ELECCIONES 2004 | Reacciones en Izquierda Unida

La rabia del voto prestado

Carlos E. Cué

La mayoría de los dirigentes de IU evitaban atacar al PSOE en las circunstancias de anoche. Pero los militantes estaban rabiosos. Porque, a pesar de la alegría de echar al PP, consideraban injusto que fuera a costa de IU. "Se llevan un voto prestado", se repetía en todos los corrillos. Nadie atacaba al coordinador, ni hablaba, como era de esperar, de la dirigente en ascenso de la federación, la alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar.

Francisco Frutos, el secretario general del Partido Comunista, prefería ver el vaso medio lleno. Siempre creyó que toda la protesta del No a la guerra acabaría teniendo su efecto en el PP. Decía que los cambios electorales no se hacen en dos días, es un "lento goteo", que la gente va fraguando poco a poco.

Ayer, Frutos reforzaba esa tesis. "Poco a poco, y con el empujón terrible de este brutal atentado, la gente ha ido reflexionando", sostenía. Frutos está convencido de que ya antes del 11-M se había generado en la sociedad una conciencia crítica dispuesta a no pasarle una al PP. Sin embargo, nadie había sido capaz de despertarla hasta que llegó la matanza de Madrid y la gestión de la crisis que hizo el PP.

En los pasillos del Hotel Convención, donde se había reunido la dirección de IU para seguir los resultados, no se vivía ninguna sensación de fiesta. Pero no sólo por el mal resultado de la federación. No hubiera sido posible en cualquier caso, porque todos, dirigentes y militantes, están afectados por la tragedia del 11-M.

Muchos conocen directa o indirectamente a alguna víctima. La presencia de IU en la Comunidad de Madrid es muy fuerte precisamente en las zonas obreras del Corredor del Henares más afectadas por la matanza del 11-M. Alcalá de Henares, Torrejón, San Fernando, Entrevías, Madrid Sur, Vallecas, son barrios donde la federación y antes el Partido Comunista ha tenido siempre una gran implantación.

Hasta el Hotel Convención se acercaron de hecho unos familiares de una herida que querían protestar porque no le dejaron votar. Algunos dirigentes se intercambiaban información del luto. "¿Te acuerdas de esta chica de Vallecas?", "Pues su hija está entre las víctimas".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_