Radial de peaje

Vivo en Vicálvaro y estoy sufriendo los efectos de la magnífica infraestructura con la que nos han obsequiado nuestras autoridades. Me ha llenado de asombro la nota que ha emitido el Ministerio de Fomento ante las protestas de los vecinos.

En primer lugar, se anuncia que Vicálvaro tiene una conexión directa con O'Donnell; asombroso. Hasta ahora, mi concepto "de acceso directo" no pasaba por tener que ir a San Blas para llegar a una simple incorporación y un ceda el paso que se unen a los tres carriles libres de la R-3.

En segundo lugar, Fomento asegura que iniciará diversos estudios: siempre había pensado que, cuando se emprende la construcción de una infraestructura del calibre de la R-3, se realizan muchos estudios previos para determinar el impacto que la obra va a tener.

En tercer lugar, se dice que los citados estudios pretenden determinar los flujos de tráfico de la zona. Ahórrense ese dinero, yo se lo puedo decir gratis. A eso de las siete y media de la mañana, muchos de los vecinos tenemos la costumbre de ir a trabajar, para lo que muchos de nosotros debemos acceder a la misma hora a la M-40 o a la M-30 por O'Donnell. Entonces, los atascos son insoportables, se lo aseguro.

Sin embargo, es mucho peor el regreso. Ese terrible carril que nos han dejado para venir desde el centro con un maravilloso ceda el paso (otro más) en la rotonda del Doctor García Tapia provoca una inevitable retención porque, de nuevo, los vecinos de este distrito de la capital coincidimos a la hora de regresar a casa. Señor ministro, le invito a comprobar cómo es el tráfico en Vicálvaro tras la construcción de la R-3. Deje su coche oficial y véngase conmigo y con mi familia una mañana y una tarde, y verá cómo es un atasco gracias a las decisiones que ha tomado. Venga un día de lluvia como hoy: la percepción de la situación es aún mejor.

Una última aclaración antes de terminar. Vicálvaro no quiere una mejor comunicación con Madrid: somos Madrid, un distrito de Madrid, y sólo pretendemos acceder a nuestro hospital de referencia, al centro de nuestra ciudad y a nuestros trabajos sin tener que soportar los actuales atascos. No quiero pensar lo que ocurrirá cuando vengan a vivir a Vicálvaro todos los vecinos que ocuparán los nuevos barrios.