Mayoría absoluta en Andalucía
Durante esta última legislatura vivida en el Parlamento andaluz he mantenido un espíritu de observación sobre los diversos grupos políticos en Andalucía, y he comprobado cómo mi criterio ha coincidido muchísimas veces con periodistas y analistas de la realidad política andaluza, especialmente con una persona que considero ecuánime, buen periodista y crítico, que en un artículo publicado en ABC (29-01-2002) titulado Candidata a Perder, y me estoy refiriendo a don Ignacio Camacho, con dos años de anticipación al actual periodo electoral, escribió con una gran claridad lo que estaba pasando en el PP andaluz y más concretamente en su clase dirigente. Entendí de la lectura del artículo que era un aviso a navegantes a mitad de legislatura, análisis éste del que, desgraciadamente, no se tomaron medidas correctoras en el PP andaluz, que siguió con el mismo rumbo, sin variar la ruta, a la deriva, con empecinamiento y comprometiendo, a la postre, el resultado de los próximos comicios del venidero 14 de marzo de 2004.
El artículo de Ignacio Camacho que comento es profundo y acertado en su análisis y da con el dedo en la llaga. Hace una mención especial a la actitud de Javier Arenas al desmarcarse personalmente de la posibilidad de ser el candidato a la Junta andaluza, ya que sus aspiraciones eran otras, y repito que eran. Se alejaba de la política andaluza, mejor dicho, de la lucha electoral autonómica, a la vez que ponía en un teórico tablero de ajedrez como reina a Teófila Martínez, eso sí, rodeada de alfiles, caballos y peones, todos bisoños, manipulados cual marionetas movidas por su sicario Antonio Sanz.
Decía Ignacio Camacho que la presidenta del PP andaluz estaba dispersa y falta de contundencia, respaldada por una organización débil y poco cohesionada y que transmite una enorme inseguridad, y remataba su comentado artículo muy graciosamente pero con una gran visión de la realidad diciendo que "con Arenas dedicado a tareas de rango nacional, la dirección andaluza en manos bisoñas y Teófila corriendo de un lado a otro como pollo sin cabeza, el PP andaluz ha perdido referencias estratégicas y capacidad de ordenar un proyecto de conjunto". Todos los que leímos el artículo, todos menos los bisoños y algo más, estábamos plenamente de acuerdo con su contenido.
Una Autonomía de tanta extensión superficial, poblada por más de 7,5 millones de andaluces, no se puede gobernar desde el "pluriempleo". Además de alcaldesa de Cádiz, Martínez es presidenta regional, presidenta del Grupo Parlamentario andaluz, senadora por la comunidad andaluza, portavoz de la Comisión de Comunidades Autónomas en el Senado, miembro de la Diputación Permanente, amén de otros cargos a nivel local, regional y nacional, y, como es lógico, no tiene tiempo material de atenderlos.
En el Senado se ha pasado más de dos años sin aparecer, con una excepción el 26 de marzo de 2003, que estuvo un ratito, votó y se marchó; pero sí cobra. Como portavoz de la Comisión no asistió nunca, tuvo que ser sustituida por quien ostentaba la portavocía adjunta; como senadora por la Autonomía, cortó el paso a cualquiera otra persona del Parlamento andaluz que pudiera haber llevado con más dignidad y dedicación su cometido en el Estamento de Próceres. La presidenta regional Teófila Martínez ocupa tantos sillones (en claro desacuerdo con lo que en su día manifestó el presidente nacional, "que cada culo tuviera un solo asiento"), que va por Andalucía, repito, como pollo sin cabeza.
En el PP de Andalucía impera, en gran parte del sector dirigente, el haber hecho de la política un modus vivendi. El máximo exponente de lo que digo es doña Teófila: ¿qué sueldo oficial cobra?, ¿de dónde?, ¿cuántos suplementos?, ¿cuántas dietas y de cuántos sitios?, ¿cuántas tarjetas de crédito tiene a cargo del partido, del Ayuntamiento o de cualquier otra institución?, ¿cuántos gastos pagados tiene como alcaldesa, presidenta regional o de grupo?, ¿y automóviles?, ¿quién sufraga los gastos?, ¿cuál es el montante total de todos sus ingresos derivados de su actividad política?, ¿quién es el consejero de Gas Natural? La suma de éstas y otras circunstancias, de las que son máximos responsables Arenas y Teófila, provocan, como decía el ABC de Sevilla en su portada del 28 de febrero de 2003: "el PSOE recupera la mayoría absoluta en Andalucía, gracias al desplome del PP".
Toda regla tiene sus excepciones, y como no quiero que en este totum revolutum sean medidos todos por la misma vara, he de recordar a Juan M. Armario, a Juan Pizarro, a Rafael Salas, a Esperanza Oña, a Luis de Torres, entre otros pocos, que son la excepción de la política de Arenas y Teófila en el PP andaluz, y de la falta de concordancia entre lo que dice y lo que ha hecho doña Teófila en su alocado correcaminos andaluz.
Manuel Arqueros Orozco ha sido sucesivamente senador (dos legislaturas), diputado nacional (tres legislaturas) y diputado autonómico (la última legislatura) desde 1986, siempre en representación del Partido Popular.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.