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Apuntes

Robótica, un instituto en fase de transición

El centro científico contrata con firmas punteras en transporte, informática y telecomunicación

En los últimos años, el Instituto de Robótica de la Universitat de València ha sido uno de los protagonistas de la polémica en torno al Tren de Alta Velocidad (AVE) que unirá Madrid con Valencia, debido a los informes elaborados por uno de sus investigadores, el catedrático Gregorio Martín Quetlas, a la sazón director del Instituto. Su reciente dimisión, a raíz de la disconformidad del Gobierno valenciano con los mencionados informes, ha puesto al físico Juan Domingo Esteve (Valencia, 1965) al frente de un centro que inició un grupo de profesores de Informática y Electrónica hace 15 años, y que el año pasado facturó casi millón y medio de euros provenientes en su mayor parte de contratos con empresas punteras del transporte, la informática o las telecomunicaciones.

Cuenta con el mejor visionario de realidad virtual de España, capaz para 30 personas.
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El centro ha entrado en "un periodo de transición", según Juan Domingo, que coincide con el del resto de la Universitat. "En un par de años, habrá elecciones a todos los cargos, incluido el de director", explica. "Las tareas del director se limitan a la representación y coordinación. El investigador principal de cada uno de los cuatro grupos del instituto es autónomo para firmar contratos con empresas y sólo necesita la aprobación del centro", que raramente la deniega.

Ubicado en el campus de Paterna, Robótica cuenta con 30 profesores, 21 becarios y 16 investigadores contratados. "Hacemos sobre todo investigación aplicada, con un interés social, canalizada a través de empresas y de la Administración. También contamos con subvenciones públicas a la investigación, pero en menor cuantía", explica Domingo Esteve. A lo que menos se dedican es a la robótica en sentido estricto. Los cinco grandes grupos del centro trabajan en telemática en tráfico, realidad virtual, simuladores y redes. El pequeño grupo de sensorización y robótica móvil, integrado por tres personas y del que es responsable Esteve, es quizás el que hace ciencia más básica. Trabajan en robótica móvil y visión por computador, en imágenes biomédicas y otros elementos de diagnóstico médico.

Un trabajo de gran interés social es el de LISITT o Laboratorio Integrado de Sistemas Inteligentes y Tecnologías de la Información en Tráfico. Formado en 1989, el grupo fue una de las bases para la creación del instituto. Su intención ha sido desde el comienzo la incorporación de las nuevas tecnologías al tráfico con el fin de mejorar la seguridad y comodidad en la carretera, así como respetar el medio ambiente. El grupo ha trabajado para la Administración central y la autonómica en el desarrollo de cámaras de detección de incidentes, así como en el control de mercancías peligrosas en camiones controlados por GPS y control automático de peajes de autopista, entre otros.

El Instituto de Robótica cuenta con el mejor visionario de realidad virtual de España, con capacidad para 30 personas y, en breve, funcionará otro de inmersión total, el CAVE, -con proyección en paredes suelo y techo- de los que existen dos en nuestro país. Estos sistemas están controlados por el grupo ARTEC de gráficos avanzados por ordenador, que trabaja en realidad virtual, con aplicaciones que van desde el recorrido de tranvía de Valencia (para la empresas Gecalsthom, una de las firmas de construcción de transporte más importantes del mundo), a programas de realidad virtual para el tratamiento del autismo. "El trabajo con niños autistas es una línea deficitaria económicamente", explica Esteve, pero "el Instituto tiene superávit y quiere abrir nuevas líneas de investigación como éstas", dice.

Una extensión de la realidad virtual son los simuladores que recrean lo que ocurre durante la conducción de un vehículo y, además, están conectados a otros dispositivos que se mueven. El Grupo de Simulación trabaja en simuladores concebidos, sobre todo, como herramienta de formación y constituyen un modelo dinámico completo. En Robótica han desarrollado un simulador de coche, de tranvía y de grúa para el puerto -mediante un contrato con la Sociedad Española de Estiva y Desestiva del Puerto de Valencia (SEVASA). El aprendiz, al final, no tiene más remedio que ir al sistema real, pero hasta que llega ese momento, el entrenamiento en el simulador ha ahorrado mucho tiempo y dinero.

Por su parte, el Grupo CAT o de Control y Aplicaciones Telemáticas investiga en materia de seguridad, e-learning o aprendizaje a distancia y calidad de servicio. Colaboran con la mayor empresa norteamericana de fabricación de redes, Cisco-Systems, e imparten cursos de formación a universitarios y a profesionales de las tecnologías de la información. Finalmente, la actividad del Grupo Simbad (Sistemas en Internet, multimedia y bases de datos), ha convertido a Robótica en el único miembro español del consorcio W3C, organismo independiente para la estandarización de los protocolos para intercambio de información en la web de última generación.

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