Cultura cataloga como patrimonio 12 centrales eléctricas de Jaén

La Consejería de Cultura ha abierto el expediente para la inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz de una docena de viejas centrales hidroeléctricas de la provincia de Jaén, algunas de las cuales continúan aún en servicio. Se trata de centrales creadas a finales del siglo XIX o principios del XX y que, a juicio de Cultura, tienen en común "una arquitectura muy variada, unas soluciones de manejo y conducción de agua, una ingeniería de transformación energética y otros aprovechamientos dignos de proteger".

Jaén es la segunda provincia andaluza, después de Granada, en número de instalaciones de este tipo, y la primera en generación de potencia, con 52.659 kilovatios. La delegada de Cultura en Jaén, Andrea Gómez, sugirió ayer la creación de una ruta turístico-cultural en torno a estas centrales hidroeléctricas, como ya ocurre en Cataluña.

Las centrales comenzaron a instalarse en la provincia aprovechando una geografía que ofrece caudales con desniveles importantes o regulando caídas de agua embalsada por medio de presas de diverso tamaño. Están repartidas por toda la provincia, desde las sierras de Cazorla y Segura a Sierra Mágina y Sierra Sur, pasando por las cuencas del Guadalquivir y el Guadalimar. Entre las que están en funcionamiento actualmente figuran las del Encinarejo y Jándula, en Andújar; la de Río Frío, en Los Villares; o El Arquillo, que funciona de forma automática en Linares.

Las otras instalaciones que ahora van a ser protegidas por Cultura se localizan en Espeluy, Cazorla, Villacarrillo, Santiago-Pontones, Bedmar-Garcíez, Villanueva del Arzobispo o Cambil.