Un millar de alumnos protesta en Petrer por la paliza sufrida en el instituto por una compañera
Un millar de alumnos del instituto de secundaria Azorín de Petrer se concentraron ayer ante las puertas del centro para protestar por la agresión que sufrió el viernes una estudiante de 15 años por parte de dos compañeros de la misma edad, según relató la víctima. Los padres de la muchacha anunciaron ayer su intención de denunciar a la dirección del instituto Azorín, por la presunta dejación en la protección de su hija, según anunció el padre, José Antonio Tenza. Éste afirmó que el centro no reaccionó para atajar esta situación a pesar de que conocía las agresiones. "Mi hija sufrió un ataque anterior, que le causó una fractura en un dedo, pero nos mintió y nos dijo en aquella ocasión que tropezó en clase de gimnasia", añadió.
La joven fue supuestamente acorralada por dos compañeros y empujada hasta los baños, donde la golpearon hasta dejarla inconsciente, explicó su padre. La menor sufrió la rotura de un dedo y diversos hematomas en todo el cuerpo. El padre, que ha denunciado los hechos ante la policía, afirma que se trata de un ataque continuado a su hija, quien ha recibido entre cuatro y cinco cartas con amenazas de muerte. Los estudiantes concentrados emitieron un comunicado de solidaridad con su compañera y en el escrito también resaltaron su oposición a la violencia y demandaron medidas de protección hacia la víctima de esta agresión.
El centro docente y la policía investigan ahora la agresión. Según el testimonio de la joven, los dos atacantes la golpearon en la cabeza y la dejaron en estado inconsciente, a pesar de lo cual llegó a escuchar que éstos decían que tenían la intención de cortarle un dedo.
Sobre la posibilidad de que esta agresión esté relacionada con un juego de rol, la madre de la menor manifestó a Efe que "no se puede confirmar".
El director del instituto, José Casao, explicó que el testimonio de los padres de los dos presuntos agresores no coincide con el de la víctima y agregó que éstos sostienen que sus hijos no acudieron al centro el pasado viernes y que estuvieron en casa. Casao también señaló que ha decidido abrir una investigación. Sobre el posible juego de rol, Casao dijo que esa hipótesis no está confirmada.
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