Se impone el papel
La inestabilidad del euro, provocada por la debilidad del dólar, se trasladó ayer a los mercados de valores europeos, que vivieron una jornada en la que las posiciones vendedoras llevaron la voz cantante.
El Ibex 35 cedió el 1,02% y todavía conserva los 8.000 puntos, al tiempo que el índice general de la Bolsa de Madrid perdió el 0,88%.
El mercado español abrió con un tono muy tranquilo, pero las cotizaciones apenas aguantaron una hora la creciente presión del papel. Las recomendaciones de la mayoría de las casas de análisis eran de mantener posiciones, pero prácticamente todas ellas aconsejan evitar posibles pérdidas situando órdenes de venta por si los soportes no aguantan.
Ayer, los inversores vieron cómo el Ibex 35 rompía dos de esos soportes para quedar a merced del 8.000, cuya solidez es sólo psicológica. En otro contexto, las recomendaciones de mantener habrían añadido la posibilidad de incrementar en caso de avances en los precios, pero el ambiente no acompaña.
Junto con la recuperación que muestran la mayoría de los beneficios empresariales, renace de nuevo la incertidumbre sobre la solidez de la recuperación económica, situación en la que la inestable cotización del euro, siempre a expensas de lo que haga el dólar, es un factor de peso.
Las otras bolsas europeas registraron pérdidas menores que las del mercado español, en el que todos los grandes valores del Ibex 35, con la excepción de Repsol YPF, sufrieron recortes de más del 1%. París terminó con un descenso del 0,48%, Francfort bajó el 0,56% y Londres el 0,34%, y todo ello a pesar de que la bolsa estadounidense mantenía un discreto avance del 0,36% a media sesión.
La sesión contó con pocas alternativas, aunque hubo muchos valores que comenzaron con subidas y aguantaron el chaparrón casi toda la mañana, lo que trajo consigo una contratación muy parecida a la del pasado viernes. El Mercado Continuo negoció 2.467,02 millones de euros, de los que algo más de un tercio, 853 millones, llegaron a través de operaciones institucionales.
