Los ayatolás levantan el veto a 200 candidatos reformistas iraníes

El Consejo de Guardianes de la Constitución de Irán aprobó ayer 200 candidaturas a las legislativas de febrero, que había invalidado en un primer momento, mientras los reformadores continuaban presionando para que esta instancia conservadora, no electa pero con un enorme poder, acelere el examen de las 3.600 candidaturas que anuló a principios de enero, sumiendo al país en una intensa crisis política.

El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, pidió a los 12 miembros de este órgano que controla que revisasen la prohibición que había afectado a casi la mitad de los candidatos (se presentaron 8.200 en total) y a 80 parlamentarios. El Consejo tiene hasta el 30 de enero para dar marcha atrás y según Abbas Kadkodaye, uno de los miembros del órgano conservador que tiene poder de veto sobre muchas decisiones del Ejecutivo, "el proceso de revisión está siendo acelerado".

El presidente reformista del país, Mohamed Jatamí, amenazó el lunes con boicotear las elecciones generales previstas para el 20 de febrero si el Consejo no revoca su decisión. Muchos ministros y gobernadores de provincias han señalado que dimitirán en caso de que se revoque el veto, mientras que un grupo de parlamentarios reformistas mantiene una sentada en la Cámara desde hace 10 días.

La parlamentaria Fatemeh Haqiqatju señaló ayer que las relaciones entre los conservadores y los reformistas habían alcanzado un punto de ruptura y que el resultado del conflicto determinaría el futuro de la Constitución Islámica de Irán. "Éste es el clímax de la confrontación entre los electos y los designados, sobre la forma de gobernar este país", dijo.