Chaves afirma que "no es España la que está en peligro, sino la hegemonía del PP"

En una amplia y detallada intervención, el presidente del PSOE, Manuel Chaves, se mostró convencido de que este partido, que cumple ahora 125 años, es capaz, hoy, de ganar las elecciones al PP. Al hilo de una reciente frase de Zapatero -"somos el partido que más se parece a España"-, Chaves animó a los candidatos socialistas a que sus propuestas y "valores progresistas" se transmitan con la convicción de que "todos nos identificamos con ello y lo defendemos y aplicamos en todos los rincones de España". A juicio del presidente del PSOE, no es España la que está en peligro, "sino la hegemonía del PP". Y de manera solemne añadió: "No nos van a echar de la Constitución", porque ésta, "es más nuestra que de ellos".

El presidente de la Junta andaluza construyó un discurso sobre la base de que el PSOE es el partido que mejor representa la idea de España. Hizo una referencia a la gran transformación del país en los últimos 25 años, que "digan lo que digan es fruto del esfuerzo modernizador desarrollado por el Gobierno socialista entre 1982 y 1996". Y recordó que en las elecciones de mayo de 2003, "el PSOE fue el más votado, al PP le sacamos casi medio millón de votos y esa victoria no fue flor de un día".

Pero dicho esto, advirtió sobre cualquier triunfalismo y pidió un esfuerzo para convencer a los abstencionistas. "La responsabilidad por recuperar para la política y para la democracia a todos los progresistas, a todos los hombres y mujeres de izquierda, cae sobre nosotros. Si no la hacemos nuestra, nadie se preocupará por ello, porque a la derecha nunca le ha interesado fomentar la participación democrática".

El presidente del PSOE repasó los años en los que ha gobernado el PP. Han sido, dijo, "demasiados años de prepotencia, de malos modos, de mentiras, de cainismo, de reducir al silencio al discrepante", de "estrangular las instituciones" y "crispar la vida política". Habló de la participación de España en la "guerra ilegal e injusta de Irak" y de que las diferencias entre los españoles se han multiplicado, "las oportunidades han dejado de ser las mismas para todos".

Y descendiendo al terreno de la gestión del Gobierno popular -"reaccionario en sus medidas y radical conservador en su política"- Chaves enumeró los hechos que confirman su ineficacia: "Basta con recordar las crisis alimentarias, el precio, la velocidad y la duración de las obras del AVE a Lleida; la gestión del Prestige; el accidente del Yakovlev y la imposibilidad de garantizar la seguridad".

Citó también la ordenación del sistema educativo que "ha retrocedido décadas con fórmulas rescatadas de dictadura"; las reformas laborales, que "se saldan con una rotación de mano de obra como nunca se había conocido"; la caída del gasto social en dos puntos respecto del PIB, que ha traído "deterioro en los servicios sanitarios, sociales". Respecto a la inmigración, dijo que "mientras las playas andaluzas y canarias se llenan de cadáveres, han logrado lo imposible: no controlar los flujos migratorios ni han tratado, conforme a los valores constitucionales, a los inmigrantes establecidos en nuestra tierra". Pero además, "el Gobierno y el PP han decidido utilizar el terrorismo, la unidad de España y la Constitución como coartada política para cualquier problema nacional y para tratar de obtener rentabilidad política y electoral".

Frente a esto, Chaves contrapuso una idea de España como un "conjunto de seres humanos, que viven y trabajan con la esperanza de construir con su esfuerzo y la solidaridad de todos un futuro mejor, un país más amable, una patria más acogedora. Y para perfeccionarla no necesitamos nacionalismos que nos mutilen ni tampoco nacionalismos que nos uniformen".

Coraje democrático

Así, instó a elaborar un programa electoral "que sea también un programa de gobierno" pensado no sólo para los votantes socialistas, "sino para todos los españoles"; que pruebe que "somos capaces de integrar, y el PP no, y que somos capaces de respetar las diferencias y hacer un valor compartido de todas ellas". Y añadió: "Hay que tener coraje democrático y atreverse a proponer soluciones, a adoptar los medios necesarios para aplicarlas, y debatir con los adversarios. Somos la principal referencia política y social de todos los progresistas españoles. Dirigíos a ellos: estoy convencido de que nos están esperando para, reconociéndonos, construir juntos nuestro común futuro", culminó.

Antes, había inaugurado la conferencia el secretario de Organización, José Blanco, quien acusó al PP de "poner en riesgo la cohesión social y territorial", por lo que subrayó que Zapatero "será el próximo presidente del Gobierno al tener los socialistas un proyecto de España, equipos solventes y ambición para conseguirlo". Blanco concluyó: "Tenemos ganas porque tenemos un proyecto de país y una persona capaz de ponerlo en práctica, José Luis Rodríguez Zapatero, un líder que sabe lo que es vencer con su trabajo, con su esfuerzo, convenciendo y no imponiendo".