Zapatero promete que sólo será presidente si el PSOE es el partido más votado el 14-M

La conferencia política del PSOE, que ayer avaló el programa marco y dio luz verde a la propuesta de reforma fiscal, se ha cerrado esta mañana con el discurso final del líder del partido, José Luis Rodríguez Zapatero. Durante la clausura, Zapatero ha asegurado que "sólo" estaría dispuesto a formar Gobierno si el PSOE obtiene la mayoría de votos en las elecciones. El líder socialista ha llamado a los votantes, sobre todo a los decepcionados y abstencionistas, a darle "una mayoría suficiente" para acabar con el autoritarismo del PP y para dar respuesta a los "grandes desafíos" del país.

Con esta promesa, Zapatero descarta negociar para ser investido presidente con el apoyo de otras formaciones minoritarias si triunfara en número de votos el candidato del PP, Mariano Rajoy. Así, Zapatero "sólo" formaría Gobierno de ganar en votos a Rajoy, independientemente de los escaños obtenidos, al igual que hizo Pascual Maragall en Cataluña que, a pesar de lograr menos diputados que CiU, si ganó en número de votos y negoció con ERC e ICV para llegar a la Presidencia de la Generalitat. En opinión del líder socialista, su partido tiene las ideas, los equipos y la resolución necesaria para poder obtener la que ha denominado "mayoría suficiente", es decir, ser la formación con más votos.

En este sentido, ha recordado que el PSOE ya obtuvo dicha mayoría en las municipales de mayo, al conseguir superar al PP en unos 160.000 votos, pero ha subrayado que en marzo se puede ampliar esa diferencia. Rodríguez Zapatero, se ha comprometido, además, a escuchar y respetar todas las voces pacíficas y todas las culturas, y subrayó que todas las comunidades autónomas serán llamadas a integrar, cooperar y dialogar para "ese proyecto común de España". Para el candidato del PSOE, las próximas legislativas no son unas elecciones más sino que tienen gran trascendencia por los desafíos a los que se enfrenta el país debido a la "regresión" producida con el Gobierno del PP, sobre todo en cohesión social y territorial.

La papeleta "del cambio"

Zapatero ha agregado que los votantes se encontrarán con dos papeletas, una con otra cara "para que todo siga igual" -la encabezada por Rajoy- y otra la del PSOE, que será la de "la renovación y el cambio". Además, ha inistido en que el PP no sólo no resuelve los grandes problemas del país,como vivienda, empleo o seguridad ciudadana, sino que los agrava, al tiempo que ha reiterado que el PSOE es el partido que más se parece a España, al ser "abierto, plural y tolerante", además de tener sentido de justicia social y ser capaz de conseguir grandes consensos. "Quiero ser presidente de esa España comprometida en la que caben todos, menos los violentos", ha indicado, muy arropado por su partido, incluidos Maragall y el presidente castellano-manchego, José Bono, ayer ausentes de la reunión.

Acto seguido, ha afirmado que, de ser presidente, "todas las voces pacíficas serán escuchadas y respetadas", y todas las culturas e identidades serán "llamadas a la integración, la cooperación y al diálogo en ese gran proyecto común que es España". Por último, Zapatero ha recordado que el 14 de marzo es Santa Matilde, que significa "valiente en la contienda". "Así os quiero a todos, porque nos merecemos una España mejor y juntos la vamos a ganar. A trabajar", ha concluido. Antes de su intervención, el coordinador del programa, Jesús Caldera, se ha dirigido al plenario, que durante dos días ha reunido a 1.500 personas entre invitados y observadores. Caldera ha afirmado que las propuestas socialistas para las elecciones del 14 de marzo "son más que un catálogo de soluciones para los problemas del país porque es un proyecto de país".

Según Caldera, "no existe ningún problema en ningún ámbito que haya quedado sin respuesta". Además, ha vuelto a pedir al PP que las dos formaciones celebren debates electorales para contrastar sus propuestas "porque son un derecho" de los españoles. El portavoz parlamentario socialista durante la actual legislatura ha asegurado que el PSOE "quiere algo más que un Estado protector". "Queremos unos ciudadanos fuertes, que la fortaleza educativa, cultural, laboral, económica, sanitaria, de nuestros ciudadanos sea la mejor garantía de su libertad personal y de su aspiración por la igualdad", ha subrayado. En este sentido, ha indicado que "una sociedad decente no puede permitir que se humille a sus ciudadanos". Así, ha hecho hincapié en que "aquí hay demasiados humillados, unos por acción y otros por omisión".