El supuesto 'asesino del naipe' será juzgado a finales de marzo

La Audiencia Provincial de Madrid considera concluido el sumario por los crímenes del llamado asesino del naipe y en marzo o abril podría empezar a juzgar a Alfredo Galán, de 26 años. En un principio este joven se confesó autor de seis asesinatos consumados y otros tres en grado de tentativa, pero luego se desdijo. La Audiencia ha denegado la práctica de nuevas pruebas pedidas por la defensa del acusado.

La sección séptima de la Audiencia de Madrid ha adoptado esta decisión, -según informan fuentes de la acusación- en un auto en el que deniega la práctica de nuevas pruebas pedidas por la defensa de Galán. El tribunal considera que ya existen elementos suficientes para imputarle los crímenes del llamado asesino del naipe.

La Audiencia confirma así el auto de conclusión de sumario dictado por la juez de instrucción y autoriza a la sección decimosexta a facilitar el sumario a las partes para que presenten sus escritos de acusación y de defensa. Después el tribunal fijará la fecha en la que dará comienzoel juicio.

Al asesino del naipe se le atribuye la muerte del joven de 28 años Juan Carlos M.E., el 5 de febrero, en el barrio madrileño de la Alameda de Osuna (Barajas), donde dejó su primera marca, un as de copas. Un mes después, el 7 de marzo en Tres Cantos, disparó supuestamente contra el ecuatoriano, Eduardo S. S., de 27 años, quien resultó gravemente herido, y trató de hacer lo mismo con la joven que le acompañaba, aunque se le encasquilló el arma.

Pareja de rumanos

Allí arrojó un dos de copas, y a sus últimas víctimas, una pareja de rumanos a la que disparó en Arganda del Rey el pasado día 18, les dejó un tres y un cuatro de copas. Ambos murieron.

Tampoco se descarta que el asesino del naipe haya sido el autor de la muerte, también el 5 de febrero, de un chico de 17 años en el bar Rojas de Alcalá de Henares y de una mujer de 60 años que entró al establecimiento a llamar por teléfono, a los que dispararon en la cabeza.

Además, se le acusa de la muerte del portero de la finca número 89 de la calle de Alonso Cano de Madrid, Juan Francisco Ledesma, de 50 años, que falleció el 24 de enero del pasado año cuando fue disparado en su casa en presencia de un hijo de corta edad, con lo que ésta sería su primera víctima.