Tregua en IU
Gaspar Llamazares ha consolidado su liderazgo en la VII Asamblea Federal de Izquierda Unida. Llamazares pactó con su principal rival, Francisco Frutos, secretario general del PCE, y obtuvo así un 76,5% de apoyo. Es un resultado mejor que en 2000, cuando IU se partió por la mitad y sólo un 3% de los votos hizo que el diputado asturiano sustituyera a su mentor, Julio Anguita. Sin embargo, el control de Llamazares sobre IU no es total, ya que va a tener que seguir negociando con Frutos. Además, una parte de los que le apoyaron en 2000 se ha pasado ahora a la oposición de la mano del diputado por Córdoba Luis Carlos Rejón.
El coordinador general de IU sostiene, en la entrevista que publica hoy este periódico, que "la única alternativa al PP es la izquierda plural". Llamazares utiliza el ejemplo de Cataluña, pero también el del frustrado Gobierno de izquierdas en Madrid, para demostrar que los socialistas sólo podrán alcanzar el Gobierno de España si logran el apoyo de otras fuerzas progresistas, sobre todo de IU. De hecho, esta federación está viviendo en los últimos años una paradoja. Su apoyo electoral se ha reducido a la mitad -ha pasado del 10,54% de 1996 al 5,46% de 2000-, pero cada vez ostenta más poder. Tiene consejeros en los Gobiernos del País Vasco, Asturias y ahora Cataluña, y los tuvo también en el Ejecutivo balear antes de que el PP lo recuperara. Hasta 1999 IU nunca había participado en un Gobierno autonómico. Aunque también es cierto que Llamazares apenas controla la política de esos consejeros, puesto que en IU las federaciones tienen cada día más autonomía.
Llamazares está tratando de coser los jirones que dejó la tormentosa etapa de Julio Anguita, que el diputado asturiano apoyó entonces, y se ha abierto a todas las fuerzas con las que se enfrentó la anterior dirección, en especial Iniciativa per Catalunya y los sindicatos. Ese camino tiene también detractores dentro de IU, especialmente el sector ortodoxo, que a pesar de estar en retroceso impidió cambiar el nombre de IU y añadir la palabra "Verde" como pretendía Llamazares.
La polémica participación de IU en el Gobierno vasco, que Llamazares apoya con firmeza, ha pasado inadvertida en esta asamblea. Los dirigentes parecen haber asumido que es mejor dejar en sordina este asunto que enfrenta a muchos andaluces y a Frutos con el coordinador vasco, Javier Madrazo. Poco a poco, y sobre todo porque los dirigentes asumen que en este momento de crisis no les queda otra alternativa, IU abandona sus enfrentamientos cainitas. Pero eso no le garantiza unos buenos resultados electorales. Las encuestas dicen que se mantiene por debajo del 6%. Eso sí, según sean los resultados de marzo, ese porcentaje podría ser imprescindible para el PSOE.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.