Los tópicos ruinosos del parqué

Un equipo de profesionales de Self Trade Bank en España parte de una serie de tópicos y frases hechas que circulan por los mercados de valores y que, en realidad, identifican a aquellos inversores que "juegan" en bolsa, para elaborar una guía sencilla en la que ofrecen una serie de soluciones razonadas.

La guía se basa en lo que no se debería hacer nunca para invertir en bolsa y presenta 11 capítulos diferentes en los que revisa desde los temas generales, como los relativos al mercado en su conjunto, hasta algunas consideraciones más técnicas.

En conjunto, este equipo de profesionales busca desarmar lo que en muchas ocasiones parecen técnicas de adivinación más que decisiones razonadas, que es lo que siempre propone como solución más acertada. Junto con esos lugares comunes de la práctica bursátil, se presentan una serie de problemas, con sus respectivas soluciones, habituales entre el inversor y el intermediario. Se enuncia el problema, se razonan sus causas, y se sugiere una solución, es decir, una forma de actuación para el inversor que impida que ese problema se repita.

No se trata de recetas para acertar siempre en bolsa, pues precisamente se intenta desarmar la creencia de que eso es posible, sino buscar formas de actuación más sensatas y apoyadas en unos criterios más profesionales que así se acercan hasta todos los inversores.

Dos de las secciones más interesantes, por lo novedoso para el pequeño inversor, son las que se refieren a los mercados de warrants y de derivados, dos productos que el pequeño inversor desconoce o considera demasiado peligrosos.

Los fondos de inversión y los planes de pensiones también cuentan con un capítulo informativo en el que se incluye la normativa más reciente y se ofrecen recomendaciones para manejar adecuadamente estos productos,

"La regla de oro a la hora de invertir es que, mal que nos pese, hay que hacer los deberes", es decir, no hay que aceptar consejos de "amigos" o soplos fiables sin más, sino informarse hasta donde sea posible sobre las características de la empresa o empresas en las que se piensa invertir.

Por último, la sección del Anecdotario consigue relajar el tono y darle a la guía un tono más amable y divertido, aunque también habrá quien encuentre interesante saber que se puede invertir tomando en consideración las fases de la luna, si es año electoral en Estados Unidos, un determinado día de la semana o un mes específico. Si recuerdan aquella noticia de la cartera de valores hecha por un mono lanzando un dardo a las tablas de cotizaciones de un diario y con la que resultó acertar más que el 85% de los expertos, también en esta guía encontrarán una explicación convincente sobre lo que hay que hacer ante semejante situación, que no consiste en imitar al mono y esperar que la suerte nos acompañe, sino en buscar al 15% de los expertos que acertó más que el mono.

La guía, en fin, es de lectura amena y los futuros inversores encontrarán en ella información más que suficiente para acercarse a los mercados financieros con un bagaje cultural más amplio y con un conocimiento más preciso de una serie de productos y de sus posibilidades.