De antesala a gabinete

La bóveda de la antesala del Palau Comtal, sede de los antiguos señores feudales de Cocentaina, muestra tras su restauración la decoración de estilo renacentista con la que fue concebida. Estas pinturas decorativas que datan del siglo XVI han permanecido ocultas por la cal los tres últimos siglos. Su hallazgo ha sido posible gracias al proceso de restauración del techo de la antesala o la habitación que da paso a la Sala Dorada, principal estancia del Palau Comtal y en la que la dirección General de Patrimonio ha invertido cerca de 13.000 euros.

Alex Santirso, director de la firma Santirso Conservación y Restauración, responsable de los trabajos, afirma que lo que se conoce como la antesala sería en la época una especie de gabinete donde los señores de la época se reunían como paso previo a la Sala Daurada, donde tomaban sus decisiones. "La Sala Daurada no tiene ni calefacción ni luz natural. Posiblemente no tenía en la época la importancia que ahora le damos y fuera en la antesala donde firmaban los documentos", señaló el restaurador. Añadió que las pinturas que ahora se han descubierto y que realzan el valor de esta estancia se solían utilizar para decorar los claustros de la época.

Los investigadores buscan relaciones entre los condes de Cocentaina y Carlos I

En el caso del Palau Comtal se taparon para simular su estado de deterioro. "Es posible que la iluminación de la época con velas estropease las pinturas y por ello se cubrieron de cal", agregó.

En el proceso de recuperación se ha empleado material quirúrgico. "Hemos utilizado espátulas y bisturís para evitar que se perdiera cualquier elemento que aportase información, como flores o algún escudo de armas en el techo", señaló Alex Santirso.

Esta actuación se ha producido de manera paralela a la restauración de un escudo de armas del emperador Carlos I ubicado en la chimenea del Palau Comtal. Éste es un elemento importante a través del cual el equipo de investigadores, dirigido por Belén Montes, trata de averiguar la relación entre los condes de Cocentaina y Carlos I. El escudo data de 1565 y es una pieza destacada de la sala. Se encuentra adosado al muro del interior de una chimenea de mármol de carrara de estilo renacentista.

Esta intervención se completará con la restauración de las paredes de la antesala. En ellas destacan dos lunetos partidos cuyo interior ha sido picado. "Esto lo hemos mantenido igual porque aporta información. Tal vez fueran picados en algún cambio de propiedad del edificio", señaló Alex Santirso.

La apertura al público coincidirá con la conclusión de las obras del nuevo acceso al Palau Comtal que ha financiado el Ayuntamiento de Cocentaina. "La entrada principal del Palau Comtal es a través de una gran escalinata de piedra que restringía el paso a los minusválidos", explicó Rosa Selles.