La cadena de suministro cotiza en bolsa

Zara es una de las marcas españolas más conocidas del mundo. Parte del secreto de su éxito está en su capacidad de poner en sus casi 600 tiendas en todo el mundo miles de prendas cada año. Todos los procesos que van desde que un diseñador tiene una idea hasta que la prenda está en la tienda es lo que se llama gestión de la cadena de suministro. Un estudio constata que los que mejor lo hacen en este terreno también sacan ventaja en bolsa.

Los líderes del mercado informático en este terreno crecieron el 44% entre 1997 y 2000, frente a un descenso del 11% de las retrasadas

Piense en el último pantalón que se compró en Zara. Imagine cómo llegó hasta la tienda donde lo adquirió y dé marcha atrás hasta que sólo era una tela. Alguien tuvo que transportar el producto desde un almacén hasta la tienda. Y, antes, etiquetarlo y plancharlo; coserlo; cortar el patrón; buscar, comprar y transportar hasta las plantas de Inditex, el grupo empresarial al que pertenece Zara, todos los materiales necesarios, y diseñarlo. Todos esos procesos productivos y logísticos, desde el proveedor hasta el punto de venta, son la cadena de suministro de una empresa.

La mayoría de las compañías industriales dan gran importancia a la gestión de estos procesos, de cuya coordinación y eficiencia depende que el producto esté a tiempo en las tiendas. El objetivo es asegurar el mejor servicio al cliente con un coste total mínimo, explica Jaume Ferrer, socio de Accenture.

Esta consultora, con la ayuda de un equipo de profesores de las universidades de Stanford (EE UU) e Insead (Francia), ha analizado cómo organizan su cadena de suministro 636 compañías de todo el mundo, Zara incluida, y han llegado a la conclusión de que las que mejor lo hacen recogen mayores beneficios en bolsa.

Según este estudio, el 57% de las empresas estadounidenses considera clave este proceso, frente al 32% de las europeas. Más de la mitad de los encuestados reconoce que sus inversiones en este campo se han incrementado considerablemente en los tres últimos años.

Una vez admitida la importancia de la gestión de la cadena de suministro para la mayoría de las empresas, intentaron ver su impacto en los resultados. Para ello analizaron tres aspectos fundamentales en la cadena de suministro: rotación de inventarios -cuanto mayor es la rotación más capacidad hay de responder a las demandas de los clientes-; coste de las materias primas sobre el total de las ventas -si logras reducirlo, aumenta el margen- y retorno sobre activos, que mide la eficacia en la planificación de estas actividades.

En el caso de Zara, por seguir con el ejemplo, su objetivo principal es poner en la tienda la oferta más atractiva posible para el público en el menor tiempo posible. "Es un sistema muy complejo que permite renovar sus colecciones cada dos semanas, con un ciclo de producción muy corto y que le permite cambiar rápidamente en función de la demanda", resume la profesora del Instituto de Empresa Charo Silva, quien analizó el modelo de negocio de la compañía para un caso de la escuela. Se trata de un modelo integrado verticalmente, en el que Inditex mantiene el control de todas las fases de la producción -entre el 40% y el 50% del total en plantas propias-, y distribuye desde dos grandes centros logísticos -en Arteixo (A Coruña) y Zaragoza-.

Inditex salió a Bolsa en mayo de 2001. Su valor bursátil ha aumentado un 29,25%. ¿Tiene algo que ver ese incremento con la gestión de la cadena de valor? Según el estudio de Accenture, no hay duda: "La gestión eficiente de las operaciones de compras, producción y distribución, tiene un impacto directo en la capitalización bursátil", resume Ferrer.

En el caso de las tiendas de moda, los líderes crecieron en bolsa un 17% más que la media del sector entre 1994 y 1997 y un 22% durante los tres años siguientes. Las compañías menos preocupadas sufrieron un descenso del 9% y del 7%.

La situación se repite en los otros 23 sectores productivos analizados, lo que permite a los autores llegar a su conclusión. Incluso en un mercado tan competitivo y volátil como el informático, las empresas que mejor gestionaron su cadena de suministro registraron crecimientos en Bolsa del 47% y el 44% en estos dos trienios, frente a un descenso 12% y el 11%, de los menos aventajados.

El secreto fundamental, según los autores del estudio, está en integrar todo lo posible los distintos procesos implicados. En el caso de Zara su modelo de negocio se basa en ello. Otros ejemplos son Dell, que fabrica ordenadores bajo demanda, o Nokia.