Siniestralidad

La mayoría de los expertos apunta a la subcontratación como uno de los principales causantes de la alta cifra de siniestralidad de nuestro país. Las exigencias de especialización profesional y técnica en un mercado cada vez más competitivo son los argumentos utilizados para explicar el auge de los instrumentos de descentralización productiva. Pero en muchos casos tales mecanismos se utilizan como una argucia legal con la que eludir costes y responsabilidades.

El problema presenta especial trascendencia en el ámbito de la seguridad de los trabajadores, donde en los últimos tiempos se han endurecido e incrementado las obligaciones empresariales, con el consiguiente aumento en los gastos. De esta forma, delegando la realización de determinados trabajos en otras empresas, se evita la adopción de medidas costosas y complejas.

Para hacer frente a estos factores, la ley articula una serie de medidas que tratan de evitar que la subcontratación disminuya las garantías en materia de seguridad de los trabajadores. La primera de estas medidas va a referirse a la necesaria cooperación que debe mediar entre todas las empresas que prestan servicios en un mismo centro de trabajo, atribuyéndose al empresario titular la obligación de coordinar las distintas actividades que se desempeñen en el mismo.

Por otro lado, se va a imponer al empresario principal el deber de vigilar el cumplimiento de la normativa de prevención por parte de las empresas subcontratadas que realizan su actividad en su centro de trabajo o deban operar con maquinaria, equipos, productos o útiles proporcionados por la empresa principal.

Además, se establece la responsabilidad solidaria del empresario contratante por las infracciones en materia de prevención de riesgos laborales cometidas por las empresas subcontratadas, durante la vigencia de la contrata, respecto a trabajadores que prestan servicios en el centro de trabajo de la empresa principal.

Pero, a tenor de las últimas noticias, parece que estas disposiciones se muestran insuficientes para atajar el problema, por lo que numerosas voces reclaman la búsqueda de nuevas medidas.