El hincha interesado

Portugal se ha movilizado en apoyo de España. Viejos prejuicios y rivalidades se han aparcado y los más altos responsables de la organización de la Eurocopa 2004, que se disputará en este país entre el 12 de junio y el 4 de julio, asumen públicamente que desean que el equipo de Iñaki Sáez gane a Noruega y se clasifique.

"No oculto mi deseo de que los españoles estén aquí. Forman una buena selección y, además, somos vecinos", dice Gilberto Madaíl, el presidente de la federación portuguesa y de la sociedad Euro 2004.

El pasado 12 de octubre, tras el sorteo de la repesca, Madaíl no disimuló su satisfacción e hizo algunas confesiones a los periodistas: "El resultado es muy bueno para nuestras pretensiones porque abre las puertas a grandes equipos que se habían quedado fuera. España era uno de nuestro mayores recelos. Me alegra que no juegue contra Holanda".

Portugal sabe que el campeonato gana interés y competitividad si España participa. Pero Madaíl y otros responsables políticos reconocen que la principal aportación española sería la económica.

La vecindad con España hace prever un impacto muy importante en el turismo portugués durante las semanas del torneo, en diez estadios, repartidos por todo el territorio luso. "Nuestra estimación es que por cada diez españoles que vendrían si su conjunto se clasificase sólo vendría uno de no hacerlo", dice António Padeira, director del Gabinete de Promoción de la Eurocopa, integrado en el Instituto de Comercio y Turismo, organismo del Ministerio de Economía.

Por ahora, no es posible hacer cálculos sobre los españoles que podrían desplazarse a Portugal para apoyar a su equipo porque eso dependería del calendario final, o sea de sus rivales, y de los estadios que le toquen. Un ejemplo: si España jugase en el campo del Benfica, con capacidad para 60.000 espectadores, unos 30.000 españoles podrían viajar a Lisboa. Pero en otros apenas serían la mitad.

En total, Portugal espera 1,2 millones de espectadores en los 31 partidos de la competición y otros 500.000 visitantes que no irán a los estadios. Es en esta última cifra en la que España puede tener un peso especial. "Los españoles podrán desplazarse con más facilidad que nadie a Portugal. Podrán coger el coche y traer a la familia para pasar unos días. Con los nórdicos será distinto", aclara Padeira.

Con Eurocopa o sin ella, la verdad es que España es importante para el turismo portugués. Veinte de los 27 millones de extranjeros que el año pasado visitaron Portugal eran españoles. Los noruegos fueron 46.000.

Pero los responsables de la Eurocopa están haciendo cuentas también a más largo plazo. "Nuestro objetivo esencial es promocionar el país y proyectar nuestra imagen aprovechando el campeonato europeo de fútbol", comenta Padeira.

En este contexto, España es considerado un mercado estratégico: Madrid es el mayor socio comercial de Lisboa y vende más para el mercado luso que para todo el continente americano.

Actualmente, el ICEP ya destina la mayor parte de su presupuesto para la promoción de Portugal en el mercado español y se esta haciendo una campaña publicitaria de la Eurocopa en los medios españoles distinta de la elegida para los otros países de Europa.

Pero también la proyección de de Portugal en España dependerá mucho del resultado de la eliminatoria contra Noruega: "Las cadenas de televisión españolas nos han dicho que si España participa enviarán un equipo de unas 100 personas para cubrir el campeonato, pero si España no participa, como mucho, enviarán a diez", concluye Padeira.