El arte se sumerge en las estaciones de la futura línea 11 del metro

La implicación con la realidad y la historia de los barrios en donde se ubican las estaciones de la futura línea 11 ha sido la principal de las motivaciones conceptuales de los artistas que han participado en un proyecto que pretende acercar el arte contemporáneo a la ciudadanía desde un espacio público de absoluta cotidianidad como es el metro. En la futura estación de Casa de l'Aigua, Gemma Nogueroles ha realizado el montaje Escrit a l'aigua, consistente en fotografías en 3D que evocan un viejo puente acueducto bajo el cual pasaban las aguas de los torrentes. Ramon Parramon y Núria Parés también han trabajado la memoria realizando numerosas entrevistas a vecinos que llevan viviendo años en los barrios que cubre la estación que les ha correspondido.

El trabajo plástico fotográfico se combina en este proyecto con otro de talleres que tratarán diversas problemáticas relacionadas con el espacio público y la ciudadanía. En la estación de Ciutat Meridiana, y tras bajar cinco pisos en un rápido ascensor hacia el andén, el viajero se encontrará con unas imágenes que atenuarán cualquier indicio claustrofóbico de los usuarios. Eugènia Balcells ha creado en Jardí de Llum un sensual montaje con luz, color y movimiento que evoca la vegetación de la montaña de Collserola, complementada con algunas plantas típicas de los bosques mediterráneos.

El colectivo Turisme Tàctic ha intervenido en el acceso a una zona industrial de una de las salidas de la estación de Can Cuiàs, en Montcada i Reixach. Se ha colocado una serie de cerámicas que reproducen diversos mapas y fotografías aéreas de la zona y su evolución urbanística que arranca de la década de 1970.