CBS cancela una serie de televisión sobre Reagan por presiones políticas
El Ronald Reagan que presentaba la cadena de televisión CBS era despistado e inconexo, superficial en lo político pero recio en lo moral. Quienes han visto la miniserie Los Reagan, condensada en dos episodios de dos horas cada uno, aseguran que el ex presidente republicano de EE UU no salía especialmente favorecido, al menos en el terreno intelectual. Y peor era el retrato de su mujer, Nancy, descrita como un poder fáctico en la Casa Blanca, como alguien capaz de meter la mano en la espalda de su marido para moverlo como una marioneta.
La serie no se va a emitir nunca en la CBS, porque la cadena se ha doblegado a las presiones políticas republicanas. Primero cambiaron el guión, lo volvieron a cambiar una y otra vez -18 veces en total-, pero las alteraciones no lograban evitar que el cuadragésimo presidente de EE UU dejara de tener un perfil torpe y un criterio perfectamente maleable.
La CBS había colocado la serie en su rejilla de programación para los día 16 y 18 de noviembre, en horario estelar. A lo largo de los últimos meses, los productores habían mostrado suma discreción mientras avanzaban en el rodaje. Para su desdicha, la filtración de algunas páginas del guión movilizó inmediatamente al Comité Nacional Republicano y a congresistas y senadores conservadores.
Éste el comunicado que ofreció ayer la CBS: "Aunque la miniserie mostraba unos impresionantes valores de producción y aunque los productores tienen fuentes para verificar cada escena que contiene el guión, creemos que el producto no ofrece a la audiencia de la CBS un retrato equilibrado de los Reagan". La serie podrá verse en el futuro en Showtime, un canal de pago propiedad de CBS con una audiencia mucho menor.
Secuencias suprimidas
Los 18 cambios que había sufrido el guión incluían también la supresión de secuencias enteras, especialmente una en la que Ronald y Nancy discutían sobre la mejor manera de luchar contra el sida. La primera dama trataba de convencer a su marido de que debía implicarse en esa lucha, pero el presidente cierra la conversación con la frase: "Los que viven en pecado mueren en pecado". En otra escena, Nancy le escribe una carta de dimisión al secretario de Estado, Alexander Haig, cuando cree que le está usurpando poder a su marido.
El presidente del Comité Nacional Republicano, Ed Gillespie, pidió a la CBS que sometiera el guión a un análisis de "revisión histórica" que eliminara cualquier escena cuya veracidad fuera indemostrable, un requisito que, llevado al extremo, obligaría a destruir buena parte de la historia del cine.
A los republicanos tampoco les hacía ninguna gracia que el Reagan de la serie estuviera interpretado por el actor James Brolin, el marido de Barbra Streisand. Para ellos, la cantante es una activista liberal insoportable, y más ahora que en su página web escribe: "La cancelación de la serie demuestra que la derecha siempre grita y patalea hasta que consigue que las cosas sean como ellos quieren".
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