Un centenar de amigos de la familia Picasso celebran la apertura del museo con una fiesta en Málaga

Un centenar de personas, en su mayoría de nacionalidad francesa, amigos de la familia Picasso, celebraron en la noche del sábado en un tradicional bar de Málaga la reciente inauguración del museo del artista en su ciudad natal por los Reyes de España, una fiesta privada que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.

El pintor Miquel Barceló fue uno de los españoles que acudió a la fiesta y estuvo muy animado con la música flamenca que amenizó la velada e hizo un dibujo en una bota de vino, en el conocido Bar El Pimpi, situado a escasos metros del museo Picasso y que con 40 años de vida se convirtió en el escenario elegido por los Picasso para agasajar a sus invitados.

A la luz de las velas, que casi sustituyeron la iluminación eléctrica en una noche tan especial, y adornado con mantones de manila, el gran caserón del siglo XVII que alberga el bar sorprendió a los visitantes que pisaban al entrar unas olorosas hojas en un recinto, de cuyas paredes cuelgan numerosos carteles de toros. El bailaor Chencho de Córdoba y su grupo flamenco y unos rumberos sevillanos animaron a los invitados e hicieron bailar a muchos, según contó uno de los asistentes a la fiesta. La cena, muy mediterránea, incluyó ajoblanco, pescado y aperitivos variados. La nuera y el nieto de Picasso, Christine y Bernard Ruiz-Picasso, que donaron o cedieron 204 obras del artista al museo, eran los anfitriones de la fiesta y los invitados se mostraron "muy ilusionados por el tipismo del lugar". Los Picasso buscaron "algo muy auténtico de Málaga, de siempre" para atender a sus amigos y El Pimpi, vecino del museo del artista, se transformó para la ocasión.

La inauguración del museo, proyecto impulsado por familiares del artista para cumplir su deseo de regresar a su ciudad natal, reunió el pasado lunes a cerca de medio centenar de miembros de la familia en el acto oficial presidido por los Reyes. Además de Christine y Bernard, también estuvieron tres hijos del pintor, Claude, Paloma y Maya, y su sobrino Jaime Vilató Ruiz.