Gandia afronta una oferta aburrida

¿El modelo turístico de sol y playa de Gandia está agotado? ¿Es necesario estudiar medidas para mejorar la oferta? ¿Qué papel deben desempeñar a los miembros del sector y entidades públicas? Éstas son algunas de las cuestiones que aborda un trabajo realizado por la Escuela Politécnica Superior de Gandia y coordinado por el profesor Joan Carles Cambrils, del área de Turismo, que pretende servir de base para la elaboración de estrategias de actuación dirigidas a mejorar la principal actividad económica del municipio.

El estudio parte de informes anteriores realizados entre 1973 y el año 2000, así como de entrevistas con empresarios del sector, y presenta las principales "debilidades" de la oferta actual y hacia donde hay que reconducir el sector. Según Cambrils, el perfil del turista que visita la costa gandiense apenas ha variado en los últimos 25 años. La mayoría (un 55%) procede de la Comunidad de Madrid; un 10% reside en la Comunidad Valenciana; y el 35% restante se reparte entre una pequeña parte de municipios del resto de España y turistas europeos, principalmente de Francia.

En cuanto a plazas residenciales, los últimos datos oficiales son de 1999. La playa gandiense contaba entonces con 4.100 plazas hoteleras y de hostales, y 500 de camping. "Gandia es una plaza turística madura, en cuanto a que crece poco en plazas turísticas", asegura el estudio. Aunque la cifra real de apartamentos de alquiler es difícil de calcular. Se estima que hay unas 25.000 viviendas con potencial de uso turístico, pero el 90% de ellas no figuran en el registro de la Agencia Valenciana de Turismo o están cerradas. Los alquileres ilegales, sobre los que no se puede hacer un control del servicio que ofrecen, son según Cambrils "uno de los problemas sobre los que hay que actuar, ya que dificulta que se puedan hacer programas de calidad generalizados".

A tenor de las encuestas realizadas, la mayoría de turistas destacan "el clima, la limpieza, el buen estado de la playa y la amabilidad de sus gentes" como las principales virtudes del destino gandiense. Como deficiencias, coinciden en criticar "la monotonía" de la oferta de ocio; echan en falta "más monumentos"; y el "tráfico y el ruido" son los inconvenientes más acusados. Precisamente los empresarios y hosteleros de la ciudad han manifestado al Ayuntamiento la necesidad de abordar un nuevo plan de tráfico en la playa que mejore los accesos y reduzca los inconvenientes del tránsito rodado. El Consistorio ha remitido ya al sector una propuesta de solución.

Para Cambrils existe también un problema de "diferenciación" de la oferta de sol y playa respecto a otros destinos similares del litoral valenciano. Apuesta por "sumar a la motivación de la playa otros elementos relacionados con la cultura, la formación, el deporte y el medioambiente". El estudio propone la confección de programas de actividades dirigidos a mercados "susceptibles" de acudir a la ciudad en fechas diferentes al verano, que ayuden a desestacionalizar la oferta. Entre la nueva demanda potencial menciona a los estudiantes universitarios, la tercera edad, y las posibilidades de atracción de congresos y ferias. Como oferta cultural complementaria, destaca las posibilidades de la historia de los Borja y sus lazos con la ciudad, y explotar turísticamente el yacimiento de la Cova del Parpalló, ubicado en las faldas del Mondúver, considerado como uno de los más importantes del Paleolítico Superior en Europa. Dar a conocer el interior de la Safor y los espacios naturales más próximos como el marjal, son otras de las apuestas del trabajo. Y advierte de la necesidad de "controlar" la urbanización con miras al futuro.

Concluye el informe con la necesidad de que en la búsqueda de esas estrategias para un nuevo modelo turístico "haya un consenso social". De ello dependerá el futuro de la principal actividad económica del municipio.