Retroceso

Los malos resultados trimestrales de algunas compañías de Estados Unidos han roto el precario equilibrio que disfrutaban los mercados de valores y han provocado importantes descensos, mientras que los inversores han hecho caso omiso de las buenas noticias.

Las compañías farmacéuticas Pfizer y Merck registraron sendas caídas en sus resultados del tercer trimestre, al tiempo que la segunda anunciaba la reducción de 4.400 empleos, justo en un momento en el que se había valorado muy positivamente el aparente final de la destrucción de puestos de trabajo por la actual crisis. Por el contrario, JP Morgan Chase y Time Warner ofrecieron crecimientos espectaculares de sus resultados trimestrales, pero el mercado se quedó con los datos negativos después de varios días de titubeos y una situación cada vez más preocupante en Oriente Próximo.

En conjunto, las expectativas de una pronta recuperación económica en Estados Unidos se vinieron abajo de golpe para unos inversores cuya confianza había perdido impulso en los últimos días debido, en parte, a la irregularidad de los indicadores económicos. El índice Dow Jones de valores industriales de la Bolsa de Nueva York cedía el 1,49% y quedaba al borde de los 9.600 puntos, tras haber arrastrado a la baja a la mayoría de los mercados europeos.

El Ibex 35 perdió ayer el 1,32% para cerrar en 6.914,60 y el índice general de la Bolsa de Madrid cayó el 1,41%, con lo que terminaba la sesión en 734,42 puntos.

La contratación en el Mercado Continuo se animó relativamente, pues se negociaron 2.006,15 millones de euros, la cifra más alta de las últimas 12 sesiones, pero con 750 millones de euros aportados por las operaciones institucionales.

El movimiento de arrastre iniciado ya unas horas antes en la Bolsa de Tokio, con importantes retiradas de beneficios, fue especialmente duro con el resto de las bolsas europeas, destacando el 2,50% que bajaba Francfort. París bajó el 1,80% y Londres el 1,53%.