Aguirre: "No nos confiemos. Todavía no hemos ganado"

"Estamos viendo unas encuestas que nos son favorables, y eso es agradable. No nos confiemos. Las encuestas dicen que vamos ganando, pero no ha llegado el final. Todavía no hemos ganado". Eso les dijo ayer Esperanza Aguirre a los interventores y apoderados de su partido. Aguirre pidió a los suyos que cada uno convenza a un madrileño que votó al PSOE y ahora está enfadado con ese partido: "Con eso tenemos ganadas las elecciones".

"Si cada uno de los 73.000 militantes que somos en Madrid convenciera a un votante de los que se equivocaron en mayo votando al PSOE y a IU tendríamos ganadas las elecciones", afirmó Aguirre en un mitin en el que estuvo acompañada por Mariano Rajoy, líder del PP, Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, y Pío García Escudero, presidente del PP madrileño. Una vez más, no estuvo en el acto el secretario general del PP madrileño, Ricardo Romero de Tejada.

Aguirre se felicitó porque dentro de dos semanas concluya una "campaña tan larga y accidentada", marcada por "los odios y luchas fratricidas dentro del PSOE, donde nadie se fía de nadie". La candidata del PP tildó a la FSM de "partido de la envidia y el rencor", Y aseguró que su líder, Rafael Simancas, "ni sabe ni se merece gobernar la primera autonomía de España". Por eso reclamó a los suyos que se lancen a la calle a buscar apoyos: "A convencer a los que nos votaron y a los que no lo hicieron, porque hay mucho en juego, y Madrid no está para que los socialistas se la repartan".

Antes que Aguirre, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, arengó a los populares (que abarrotaban el auditorio de un hotel con un aforo de 2.500 personas) con frases como las siguientes:

"Deberíamos invitar a [Rafael] Simancas a nuestros mítines, así no hablaría de que hay desánimo; aquí no lo hay".

"Condenamos el transfuguismo, pero no estamos dispuestos a que el PSOE, en vez de pedir perdón, pretenda utilizar nuestras instituciones democráticas y la Comunidad de Madrid para esconder su absoluta incapacidad para asumir su responsabilidad en su crisis".

"Los problemas internos se lavan en casa. No se monta un paripé sólo para que quede constancia de sus divisiones".

"Necesitamos al PSOE, pero le necesitamos en la oposición, porque no está maduro para gobernar".